La situación nacional de Haití ha ido evolucionando, incrementando la violencia y las muertes a lo largo de los últimos años
Recientemente, Haití se encuentra en el ojo internacional tras la llegada de una fuerza multinacional keniana que busca lograr la pacificación en el país, el cual que se ha visto envuelto en las incesantes llamas de la violencia.
José Abreu, ex cónsul en Haití y experto en el tema Haitiano, conversó en una entrevista en Despierta con CDN sobre la crisis haitiana y la misión de paz liderada por Kenia.
Haití, sumido en graves problemáticas
‘‘La situación de Haití es muy grave’’, fue lo que expresó el ex cónsul José Abreu.
En estos momentos en Haití el sistema de salud está colapsado, la educación e infraestructura se encuentran en un muy profundo declive, además la crisis ha sobrepasado todo esto y se ha vuelto un tema de seguridad y hambruna.
Más de 1.5 millones de ciudadanos haitianos están viviendo una hambruna profunda, asegura el especialista. Además, resaltó que el 50% de las instalaciones de salud no están operando por temas de falta de insumos, deficiencia en la electricidad.
El exfuncionario teme que de incrementar la deficiencia más en el sistema sanitario de Haití fácilmente podría afectar a la República Dominicana en gran medida.
Aunque en el tema de la seguridad dominicana, Abreu manifestó que no representa peligro para el país debido a que el ejército dominicano cuenta con el suficiente armamento bélico y la distancia de Puerto Príncipe a Jimaní (57 kilómetros) termina siendo un factor a favor. Añadió que las bandas tienen el interés de llevar a cabo los conflictos solo en su territorio.
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Bandas haitianas, un problema formado con el tiempo
La formación de las bandas en Haití viene desde los regímenes dictatoriales que vivió Haití en el pasado. Estos mandatarios y sus opositores tenían grupos armados con el fin de intimidarse entre ellos. Esta situación se volvió algo habitual en el país caribeño.
La incapacidad del liderazgo haitiano, sumado al sector empresarial, ha jugado un papel importante en esta situación.
Hace unas semanas el primer ministro haitiano Gary Conille le indicó al líder pandillero ‘‘Barbecue’’y a las bandas que entregaran las armas. Esto en respuesta a declaraciones ofrecidas por el pandillero a unirse en colaboración con la nueva administración haitiana representada por Conille. José Abreu expresó que la solicitud por parte de Barbecue debió haber sido acogida por el primer ministro. Esto debido a que Haití ha sufrido mucho y buscar un consenso con los principales responsables de la crisis es lo más factible.
Un verdadero muro integral
José Abreu señaló que hay algo que el gobierno dominicano puede hacer para ayudar en esta situación, resaltando que si bien es importante que la frontera se mantenga segura y resguardada por las tropas del ejército, es vital realizar la construcción de hospitales a lo largo de la zona fronteriza.
Esta iniciativa ayudaría a reducir el número de parturientas haitianas que se observan en el interior del país.
El ex cónsul dijo que el problema de salud puede salirse de control en el vecino país y afectar a la República Dominicana, por lo que tener estos centros de salud ayudaría a la revisión sanitaria de quienes entran al país.
La creación de zonas francas es otro de los puntos mencionados por Abreu, los cuales generarían fuentes de empleo con un resultado beneficioso para ambas naciones.
‘‘Eso sí sería un verdadero muro fronterizo, porque esos ciudadanos vienen y se regresan a su país’’, expresó José Abreu.
El futuro de Haití
Con el rumbo que llevan las acciones tomadas hasta el momento por las autoridades haitianas al cabo de unos meses, todo seguirá igual o puede que peor, asegura el exfuncionario.
El tema de la pacificación de Haití es un tema complejo que, según afirma el experto en el tema haitiano, tardará décadas.
Factores como el tamaño geográfico de Puerto Príncipe, su población, además de una gran cantidad de ciudadanos que viven en la indigencia y la insalubridad, harán difícil una normalización de la nación.
Abreu concluyó de que República Dominicana podría influir enormemente en la restauración de Haití. Esto con la creación en la frontera de los centros de salud, y creación de empleos mediante zonas francas. Esto tomando en cuenta que Haití es el segundo socio comercial más grande para República Dominicana.
Garantizando el acceso a la salud, empleo y afianzando el comercio entre ambas naciones, esto se convertiría en un eslabón que ayudaría a Haití a superar una era de oscuridad de la que actualmente no parecen poder salir.
