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EN VIVO: Discurso de rendición de cuentas del presidente Luis Abinader

Santo Domingo, RD.- El presidente de la República Dominicana, Luis Abinader, pronuncia, en estos momentos, su primer discurso de rendición de cuentas, hoy sábado 27 de febrero, en ocasión de la conmemoración del 177 aniversario de la Independencia Nacional.

Esta ceremonia, que inició a las 10:00 de la mañana, acompañan al Mandatario legisladores, diplomáticos y funcionarios del Gobierno.

La rendición de cuentas del presidente de la República está establecida en el artículo 114 de la Constitución, donde parte del contenido expresa que es su responsabilidad rendir cuentas anualmente, ante el Congreso Nacional, de la administración presupuestaria, financiera y de la gestión del año anterior, que además deberá ser acompañada de un mensaje explicativo de las proyecciones macroeconómicas y fiscales, los resultados económicos, financieros y sociales esperados dentro de la ley de presupuesto aprobada para ese año.

¿QUÉ LE DIJO LUIS ABINADER AL PUEBLO EL 16 DE AGOSTO 2020?

En una alocución de 44 minutos, Abinader dejó claro que marcaba una diferencia abismal entre los que acabada de sustituir, a los que considera corruptos y saqueadores.

SALUD:

“Hoy me comprometo a dedicarme en cuerpo y alma a situar nuestro sistema sanitario donde los dominicanos merecen que esté: entre los mejores de América Latina.

Por ello, sirva este acto de recepción de la Banda Presidencial para adquirir aquí un compromiso solemne: Nadie va a quedar desatendido ni abandonado a su suerte porque de esta crisis vamos a salir, todos y juntos.

Bajo mi presidencia el sistema sanitario no colapsará. Pero es importante que entendamos que después de casi seis meses de la aparición de la pandemia en el país, recibimos la conducción del gobierno en plena expansión del virus, ya con mil 400 fallecidos y más de 85 mil contagiados.

En los próximos meses aumentaremos el número de camas donde sea necesario, duplicaremos nuestra capacidad de camas en las unidades de cuidados intensivos, pondremos en marcha 12 hospitales temporales, y formaremos a más de 1.000 médicos y enfermeras en un gran programa nacional para ser más eficaces en la lucha contra la Pandemia.

Tal empeño será posible porque vamos a reestructurar la arquitectura institucional del Estado para eliminar los organismos e instituciones innecesarias o con duplicidad de funciones y destinaremos esos fondos a la inclusión de más de dos millones de ciudadanos al seguro familiar de salud de forma que para diciembre de este año, la salud pública dominicana será, universal y gratuita”.

ECONOMÍA:

“La pandemia es global. Y la crisis económica que ha traído consigo también lo es. El daño causado ya es el mayor desde la II Guerra Mundial.

El Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional y la Organización para el Desarrollo y la Cooperación Económica proyectan un crecimiento global negativo, por lo que la recuperación no llegará ni rápida ni fácilmente.

En el pasado no hubo un aumento del bienestar de los ciudadanos, pero sí un aumento de la deuda y de nuestro déficit. Este es el escenario al que nos enfrentamos. Este es el balance que nos hemos encontrado. Un balance que estamos firmemente comprometidos a revertir.

Mejorando la calidad del gasto y eliminando dispendios y corrupción que durante años solo han aumentado el déficit y consecuentemente la deuda pública sin mejorar la calidad de vida de los dominicanos. Que no pierdan su tiempo los auspiciadores de la malversación. Nada ni nadie nos hará variar este compromiso.

Jamás, gobierno alguno, enfrentó semejante combinación de retos y amenazas.

La crisis y sus efectos nos traen muchos meses de sacrificio y disciplina, pero siempre conservando la esperanza en un porvenir mejor. Por ello, la prioridad es la de crear las condiciones para recuperar la producción y el empleo utilizando todos los mecanismos que estén a nuestro alcance para lograr dicho objetivo, por eso les anuncio que:

Continuaremos los programas de ayuda FASE, Quédate en Casa y Pa’Ti para lo que queda de este año 2020. Extenderemos las facilidades tributarias en especial para las pequeñas y medianas empresas e implementaremos un Programa de Garantías y Financiamiento dirigido a los sectores afectados por la pandemia por más de 100.000 millones de pesos.

Iniciaremos un plan de reparación y construcción que impactará a más de 30.000 viviendas para reactivar las economías locales en todo el país.

Impulsaremos que el Banco de Reservas de prioridad a los proyectos del sector turístico, industrial y de exportaciones que creen empleo y que estén detenidos por la falta de financiamiento.

Presentaremos el próximo lunes 24 el Plan de relanzamiento del Turismo con el objetivo de impulsarlo y recuperar la afluencia de visitantes previa a la pandemia.
Vamos a disponer, por medio del Banco Agrícola, de 5.000 millones de pesos de financiamiento a tasa de interés cero para la nueva siembra. Y prestará apoyo a la comercialización y asistencia técnica para garantizar la seguridad alimentaria”.

VIDEO:

EDUCACIÓN:

“La verdadera razón de ser de un gobierno es el bienestar de su gente. Y no se puede aspirar a grados mayores de bienestar y de igualdad sin Educación. La auténtica palanca transformadora de la sociedad es la formación y el conocimiento.

Decía Bertold Brecht aquello de; «Qué tiempos serán estos, que hay que defender lo obvio». Pues bien, aquí me tienen, defendiendo una vez más una obviedad tan grande como olvidada: Que la República Dominicana debe tener el sistema educativo que merece y que no debe ser otro que el mejor.

No por casualidad, el pueblo dominicano convirtió en un estandarte la legítima y necesaria demanda de que se destine el 4% del Producto Interno Bruto a la Educación.

Sin embargo tristemente, ese 4% no se ha invertido como debería, hubo más negocio que educación.

Así pues, no empezamos con ninguna ventaja. Según el Banco Mundial la expectativa de escolaridad de un niño dominicano es de 11.3 años, pero la escolaridad efectiva por manejo de competencias se reduce a 6.3.

El 20 por ciento de nuestro alumnado no completa el ciclo de enseñanza primaria y el desencuentro entre el modelo de las instituciones formadoras de educadores y el currículo vigente de nuestros centros educativos es evidente.

Hemos empeorado en los informes PISA desde 2015, situándonos hoy en el último lugar de 79 países en matemáticas y ciencias y en el penúltimo en lectura.

El diagnóstico de nuestro sistema educativo es, sin duda, grave y no pienso maquillar tal condición, ni voy a consentir que siga así”.

INSTITUCIONALIDAD:

“Pero no existen transformaciones sin las reformas institucionales necesarias que garanticen que somos un pueblo de leyes y no una comunidad sometida a la cambiante voluntad de sus gobernantes. La Historia no es lineal y en la República Dominicana hemos aprendido esa lección por las malas demasiadas veces.

El inventario de trágicos retrocesos desde nuestra Independencia así lo confirma. Nada sin esfuerzo está garantizado para siempre. Por eso, la vigilancia para mantener la democracia no termina nunca.

Los aquí reunidos en la Asamblea Nacional, desde nuestras distintas responsabilidades institucionales, somos los guardianes del legado democrático y, como tales, no podemos fracasar en el objetivo de conciliar la libertad con la Justicia.

Porque sin Justicia no puede existir la democracia. Por ello, uno de los primeros decretos que firmaré hoy será para designar un Procurador General políticamente independiente, capaz de hacer lo justo, incluso si todos están en contra, y de evitar lo injusto, incluso si todos están a favor”.

TRANSPARENCIA Y LUCHA CONTRA LA CORRUPCIÓN:

“Una democracia de calidad, a las puertas de la tercera década del siglo XXI, requiere una rendición de cuentas vertical. Esto supone un sistema de frenos y contrapesos entre los poderes del Estado, para que ninguno prevalezca sobre otro.

El gobierno debe estar sometido a una fiscalización ciudadana permanente y transparente. Eso también es democracia y no sólo la emisión puntual de la expresión ciudadana que representa el depositar una boleta en una urna cada cuatro años.

Un reconocimiento pleno de los derechos fundamentales de la ciudadanía exige también la existencia de un régimen justo de consecuencias para aquellos que violen la Ley, sin ningún tipo de privilegio o impunidad, y de una distribución socialmente equitativa de los frutos del crecimiento económico y de la riqueza nacional.

Y hoy, aquí, les digo que nuestra democracia ha sido dañada. En este punto quiero ser muy claro, preciso, y contundente. En el gobierno que iniciamos hoy, no se permitirá, bajo ningún concepto, que la corrupción del pasado quede impune, el que robó dinero del pueblo, tiene necesariamente que pagar en la justicia por sus actos.

De igual manera quiero hacerles una advertencia a los nuevos funcionarios que me acompañarán en el gobierno del cambio: No voy a tolerar ningún acto de indelicadeza y mucho menos de corrupción en mi gobierno.

El funcionario que se equivoque con el dinero del pueblo, será inmediatamente destituido y puesto a disposición de la justicia. Estamos convencidos de que la corrupción de arriba incentiva la de abajo, que es la delincuencia, que se traduce en inseguridad. Y ambas tienen que ser combatidas sin tregua.

Quiero reiterar para que nadie se confunda, que no habrá impunidad para la corrupción del pasado, ni tampoco para la que se cometa en el futuro.

Estoy comprometido con el pueblo dominicano, con mi familia y con la memoria de mi padre a encabezar un gobierno trasparente y ético, donde el dinero del pueblo se maneje con total y absoluta pulcritud.

Como ven, los retos son difíciles y habrá quien sienta que su ánimo flaquea ante la colosal magnitud de la tarea. No es el caso de los dominicanos y dominicanas y, gracias a su inspiración, tampoco el de su presidente”.

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