Al menos un 25% de los alimentos que se producen en el mundo se pierden o desperdician, según un informe publicado por el Banco Mundial.
Las razones varían. En América del Norte, la responsabilidad recae mayormente en los consumidores mientras que en África Subsahariana se pierden grandes cantidades de comida durante su producción y procesamiento.
Según Jim Yong Kim, presidente del Banco Mundial, la cantidad de comida que se desperdicia es vergonzosa, si tenemos en cuenta que millones de personas se acuestan con hambre cada noche.
El informe dice que es posible reducir esta cantidad modificando la conducta de los consumidores, mejorando las técnicas agrícolas y haciendo grandes inversiones en el sistema de transporte y almacenamiento.
