Santo Domingo, RD.- La inseguridad energética en la República Dominicana causa anualmente más de 150 personas pierdan la vida electrocutadas. Esto como si los cables de alta tensión estuvieran al acecho de sus víctimas. Así lo dio a conocer Julissa Céspedes en su programa el Reporte Especial.
El informe periodístico establece que los tendidos eléctricos, electrodomésticos, altos voltajes, entre otras cosas, son una trampa mortal que ha cobrado casi 3,000 vidas en los últimos 14 años.
La investigación establece que tras analizar las estadísticas del Ministerio de Interior y Policía, entre 2007 y 2021, al menos 2,971 personas murieron electrocutadas. Quiere decir que cada dos días alguien muere debido a una descarga eléctrica
Causas más comunes de muerte por electrocuciones
En su reporte, Julissa Céspedes menciona algunas muertes, como la de Daniel de La Cruz Manzueta, de 55 años. Se electrocutó el martes 24 de mayo, momento en que este manipulaba un camión tipo grúa para subir una madera a un camión. Un brazo de ella hizo conexión con un cable de alta tensión. El hecho ocurrió en la comunidad Sabana Potrero, del distrito municipal Mamá Tingó de Yamasá.
En el informe también se recuerda la muerte de Odalis Martínez, de 20 años. Falleció tras hacer contacto con un cable de alta tensión mientras instalaba una puerta en un edificio de apartamentos. Estaba ubicado en el barrio Los Sufridos de Puerto Plata. Dos días después, el 29 del mismo mes, le tocó a Eladio Medina Bocio, de 41 años. Murió al recibir una descarga eléctrica cuando tumbaba un racimo de palma real con una vara metálica, en Monte Planta.
En más de una ocasión se ha criticado que los alambres de tendido eléctrico estén en alturas inadecuadas para la seguridad ciudadana.
Víctimas más recurrentes
Los hombres son las víctimas más recurrentes de muerte por electrocución en el país con al menos 2,260 decesos en los últimos 13 años. Esto representa más de 84 por ciento de los fallecimientos. Por otro lado, los menores de 15 años ocupan el primer lugar del grupo etario más afectado, con 340 fallecidos. El informe periodístico destaca que de esa cifra al menos 86 tenían entre 0 y 4 años de edad.
El Reporte Especial rememora el fallecimiento del niño José Ángel Carrasco, de 11 años. Murió electrocutado cuando intentó conectar un cargador de teléfono. El hecho ocurrió en Jarabacoa, el 4 de enero de este año.
En enero también falleció la adolescente Crismeilyn Guzmán, de 12 años. Falleció electrocutada por un shock eléctrico mientras utilizaba una tableta que estaba conectada a la electricidad. Guzmán vivía en el sector La Manzana del municipio de Moca.
Responsables de los cableados de alta tensión
La Empresa de Transmisión Eléctrica Dominicana (ETED) es la encargada de gestionar todas las redes de alta tensión del Sistema Eléctrico Nacional Interconectado (SENI). Este provee servicios de transporte de energía eléctrica a todo el territorio dominicano. A nivel nacional posee alrededor de 5,349 kilómetros de líneas de alta tensión en diferentes voltajes de 69 kilovatios, 138 y 345kv. También el cambio de postes y de altura se encuentra dentro de sus responsabilidades.
Carolina Ramírez, especialista en seguridad dice que la supervisión, y revisión de que los hogares cuenten con cableados adecuados también recae en las autoridades.
Quemaduras por electricidad
Eddy Bruno, director Unidad de Quemados Pearl F. ORT, del hospital Ney Arias Lora, asegura que el 31% de los casos que llegan a este centro son producto de quemaduras por electricidad. Anualmente reciben aproximadamente 170 casos.
Las quemaduras por electricidad suelen ser de tercer y cuarto grado. En el tercer grado destruyen la epidermis y dermis, afecta la sensibilidad y suele requerir injertos de piel para cerrar la herida.Y las de cuarto grado dañan los huesos, los músculos y los tendones subyacentes. No hay sensación en la zona, ya que las terminales nerviosas han sido destruidas. En la mayoría de los casos hay que apuntar en ocasiones brazos o piernas dependiente de la parte del cuerpo que estuvo en contacto.
Eddy Bruno, director Unidad de Quemados Pearl F. ORT, del hospital Ney Arias Lora.
Conexiones ilegales son un factor de riesgo
En la investigación transmitida por CDN se establece que las conexiones ilegales son un factor de riesgo. Personas sin experiencias, y sin los equipos adecuados se suben a los postes de luz tratando de hurtar la energía.
En diciembre del año pasado la Procuraduría General Adjunta para el Sistema Eléctrico sometió a la justicia a 11 empresarios. Se les imputó de cometer fraude contra el sistema eléctrico, mediante la sustracción de energía por valor de casi 20 millones de pesos.
Las empresas involucradas, algunas formales y otras informales, y sus respectivos propietarios, son:
- Cabañas los Coquitos, de Juan Antonio de la Rosa, y una granja de pollo sin nombre, de Robinson Alberto Ferreira Frías.
- EIRL Sagama Meat Market, cuyo propietario es el señor Manuel García Sarita.
- Bodega García, cuyo propietario se identifica como Orlando García Matos.
- También, figura una empresa distribuidora de bebidas y cuarto frío, propiedad de un señor de nombre Emegildo Morla Calderón.
- Las Américas Car Wash, cuyo propietario se identifica como Horacio Andrés Balbuena
- Una granja de pollo cuyo propietario es identificado como Nasín Abel Hernández.
- Las empresas Bodega los Boricuas, Centro Médico Juan Carlos, Hongos del Valle y Cabañas las Cañas, con sus respectivos propietarios Evangelista Bidó, Nicolás Lembert Báez, Yesmenia Durán Amarante y Juan Antonio de la Rosa.
Condenas a las empresas de electricidad
En más de una ocasión, familiares de las víctimas fatales de las muertes por descargas eléctricas han demandado a las empresas de electricidad.
Entre las sentencias de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) figura la dictada el 27 de enero de 2017. La dictó la Segunda Sala de la Cámara Civil y Comercial de la Corte de Apelación del Distrito Nacional. Condenó a la ETED al pago de más de 2 millones a favor de José Luis Hernández y Angélica Mena. Esto como indemnización por daños morales y materiales recibidos a consecuencia del accidente eléctrico que produjo la muerte de su hijo José Luis Hernández Mena. 500 mil pesos a favor de Diego Rodríguez Mena, por concepto de daños morales por la pérdida de su hermano. Más el uno por ciento (1%) de interés mensual de dichas sumas, a título de indemnización complementaria.
