Bonao,RD.- El empeño en retener a dos mujeres en una relación paralela pudo haber llevado a un hombre, de 58 años, a acabar con la vida de estas y un seguridad que intentaba detenerlo, según afirman allegados al homicida y las víctimas.
Fue la última vez que habló con su esposo Basilio Lebrón, un día después ella y sus hijos lloran la muerte de su proveedor.
Con flores y velones en el Residencial Shamar II honran a la seguridad que cayó víctima de la furia de un hombre que, luego de matar a María Ortiz, de 41 años, se dirigió a acabar con la vida de su esposa Mayra Mordan de 52.
En el paseo Santa Clara, donde residía el tiple homicida con su esposa, los vecinos tienen opiniones encontradas sobre el comportamiento del victimario, aunque hay quienes afirman era violento y se rehusaba a terminar las relaciones que, supuestamente, llevaba en forma paralela.
La tragedia mantiene consternados a los residentes en Bonao que demandan justicia.
