Un niño de Wisconsin, llamado Christopher de ocho años de edad, está siendo considerado un héroe por llamar al 911 después de que su padre presuntamente sufriera una sobredosis por heroína y casi perdiera la vida. Todo oucrrió alrededor de las 5: 45 p.m. del pasado miércoles 25 de enero, el chiquillo tomó el teléfono y llamó diciendo:
«Creo que mi papá ha muerto… No se despierta para nada»
El padre de Christopher estaba desplomado sobre el asiento del conductor y estacionado frente a un edificio del distrito escolar en Waukesha, mientras los dos hermanos menores, de cuatro y seis años, también estaban dentro del vehículo.
Los operadores de la línea de emergencia trabajaron duro para averiguar dónde se encontraba el niño, pidiéndole a Christopher que describiera el área a su alrededor.
-¿Sabes exactamente dónde estás?
-No, no tengo idea -dijo Christopher-.
-¿Eres capaz de describir lo que te rodea ahora mismo? -preguntó el despachador.
-Hay muchos árboles -contestó Christopher, describiendo también que estaba junto a un edificio con grandes ventanas y que veía casas situadas detrás de una valla.
Mientras los operarios trabajaban para usar el GPS y encontrar la ubicación de la familia, un buen samaritano se detuvo para ayudar, según un medio local. El hombre le dio al operador del 911 la dirección exacta del edificio y contó todo lo que había visto: