La política adoptada hace dos años por el gobierno de Estados Unidos para aproximarse a Cuba ha traído beneficios concretos a ciudadanos estadounidenses y cubanos, afirmó este lunes el vocero de la Casa Blanca, Josh Earnest.
Esa nueva política «ofrece más libertad a ciudadanos estadounidenses para visitar Cuba o enviar dinero a miembros de su familia en Cuba, o participar en negocios. Son buenas cosas, son beneficios que disfrutan ahora ciudadanos estadounidenses», expresó.
El presidente electo, Donald Trump, amenazó con poner freno a esa aproximación.