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Nuevos confinamientos en Australia ante el avance de la COVID-19

Desde el inicio de la pandemia, Australia acumula más de 30,500 contagios de la COVID-19, con 910 muertos, y ha vacunado a poco más de 1,3 millones.

Sídney.- La remota ciudad de Alice Springs, con 25,000 habitantes y gran parte de población aborigen, quedará confinada desde esta noche en Australia, donde el confinamiento afecta a más de la mitad de sus 25 millones de habitantes ante el avance de la COVID-19.

Desde el fin de semana, las autoridades han implementado confinamientos breves y localizados siempre que detectan un rebrote de los contagios, que se han disparado debido a la presencia de la variante delta del coronavirus.

Las autoridades de Alice Springs (centro) explicaron que la medida, que estará vigente tres días, se toma a modo de precaución después de que un minero, que después dio positivo por la COVID-19, pasara unas siete horas en el aeropuerto de la ciudad a la espera de un vuelo.

En la presente jornada las autoridades informaron de 22 nuevos infectados en el estado de Nueva Gales del Sur, cuya capital -Sídney- y ciudad más poblada del país tiene vigente un estricto confinamiento hasta el 9 de julio, cinco en Australia del Sur y tres en Queensland.

El primer ministro, Scott Morrison, ha sido hoy la diana de varios ataques lanzados por gobernadores regionales a raíz de la campaña de inoculación con las vacunas de Pfizer y AstraZeneca.

Annastacia Palaszczuk, jefa del gobierno regional de Queensland, y Mark McGowan, su homólogo de Australia Occidental, reprobaron públicamente la recomendación anunciada por Morrison de vacunar con el fármaco de AstraZeneca a menores de 40 años.

Palaszczuk recriminó al primer ministro que la decisión no se haya tomado durante la reunión del gabinete nacional y remarcó que seguirá priorizando la vacuna de Pfizer a los ciudadanos de Queenland menores de 40 años, en lugar de AstraZeneca.

El ministro de Salud, Greg Hunt, trató de mediar en la batalla al asegurar que los beneficios de la vacuna de AstraZeneca son mayores que los riesgos y que todas las personas son informadas sobre los posibles efectos secundarios.

Desde el inicio de la pandemia, Australia acumula más de 30,500 contagios de la COVID-19, con 910 muertos, y ha vacunado a poco más de 1,3 millones con la pauta completa, mientras más del 25% de la población ha recibido al menos una dosis.

Fuente: EFE

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