El panorama es prácticamente desértico en la zona
República Dominicana.– Residentes y vacacionistas varados en la zona de Bayahibe, desde donde salió el primer infectado por Covid-19, afirman que las actividades sociales y económicas están reducidas al mínimo con la crisis del virus.
En el epicentro del coronavirus en el país hace casi ya dos meses, el panorama es prácticamente desértico.
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Residentes y turistas que permanecen en territorio dominicano hasta que se solucione la situación, exponen que a pesar de que mantienen las esperanzas por conservar la salud, sobrevivir a la merma comercial se hace prácticamente insostenible.
Otros que trabajan en la zona de playa relatan que en el último mes y medio viven de las ayudas sociales y la caridad humana.
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Informaciones extraoficiales dan cuenta de que en la zona de Benerito se dispuso la habilitación de un centro de aislamiento donde permanecen decenas de personas.
Esta disposición a raíz de que el primero de marzo se detectara el primer caso de COVID-19 en el país, un paciente extranjero que permanece ingresado en el Hospital Ramón de Lara de la Fuerza Aérea.
Por: Patricia Dipré
