PRISTINA, Kosovo.- Opositores de Kosovo lanzaron el martes gases lacrimógenos y de pimienta dentro del Parlamento y arrojaron piedras y pintura rosa contra la policía en el exterior del edificio, en otro intento de forzar al gobierno a renunciar a sus últimos acuerdos con Serbia y Montenegro.
Albin Kurti, líder del opositor Movimiento Autodeterminación, atacó a ministros con aerosoles de pimienta, y los legisladores se vieron obligados a evacuar el salón principal. Fuera, también la policía utilizó gases lacrimógenos para evitar que los manifestantes que lanzaban piedras irrumpieran en el edificio. Se rompieron ventanas y la policía antimotines quedó cubierta de pintura rosa.
Los legisladores de la coalición en el gobierno celebraron después la sesión en otra sala del edificio. No se permitió el acceso a los parlamentarios de oposición, y el presupuesto de 2016 quedó aprobado por 79 votos a 1.
«Estas sesiones son ilegítimas y esas decisiones no pueden considerarse legítimas», dijo Visar Ymeri, del partido Autodeterminación, añadiendo que Kurti y otra legisladora habían sufrido lesiones por el aerosol de pimienta de la policía.
La policía negó esas acusaciones y afirmó que la parlamentaria Albulena Hazhiu resultó herida por el gas irritante utilizado por sus compañeros, indicó el portavoz policial Baki Kelani.
La oposición lleva dos meses causando interrupciones en el Parlamento para forzar al gobierno a renunciar a un acuerdo con Serbia que da más poderes a las comunidades de etnia Serbia, y a otro acuerdo con Montenegro sobre demarcación fronteriza.
Ymeri afirmó que el gobierno quiere «instalar en nuestro país una república serbia y dar a Montenegro 8.000 hectáreas de nuestra tierra».
Por su parte, el viceprimer ministro Hashim Thaci criticó a los manifestantes. «No tienen ningún argumento contra el plan del gobierno y quieren llegar al poder a través de la violencia», afirmó.
La oposición también dice desconfiar del Tribunal Constitucional, que considera demasiado afín al gobierno. La corte suspendió la semana pasada cualquier acción contra el acuerdo con Serbia hasta que haya fallado sobre si es acorde a la Constitución.
Kosovo declaró en 2008 su independencia de Serbia, algo que Belgrado no reconoce.
