Noticias

Estrecho resultado electoral refleja la polarización entre los salvadoreños

San Salvador.- El estrecho resultado preliminar de la segunda vuelta electoral del domingo en El Salvador, que da un triunfo pírrico al oficialista Salvador Sánchez Cerén, refleja la clara polarización que existe entre los salvadoreños.

Quizás la mejor ilustración de este hecho la dio hoy lunes el diario local El Mundo, que publicó en primera plana el mapa de El Salvador partido en dos mitades, una con el emblema del gobernante Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) y la otra con el de la opositora Alianza Republicana Nacionalista (ARENA).

El FMLN, en el poder desde 2009, es la antigua guerrilla izquierdista que se enfrentó al Ejército salvadoreño durante la guerra civil que asoló el país entre 1980 y 1992.

ARENA aglutina a los principales sectores de la derecha, que gobernó durante 20 años consecutivos, entre 1989 y 2009, y ahora es la principal fuerza de oposición.

Con el 100 % de los votos escrutados en el recuento preliminar el candidato del FMLN obtuvo un 50,11 % de los votos y el de ARENA, Norman Quijano, un 49,89 %, lo que significa 0,22 puntos porcentuales de diferencia a favor de Sánchez Cerén, informó este lunes el Tribunal Supremo Electoral (TSE).

Aunque ambos candidatos se han declarado ganadores, el TSE no oficializará al nuevo presidente electo hasta que realice el recuento definitivo, acta por acta, a lo largo de esta semana.

De los 14 departamentos del país el FMLN ganó en siete y ARENA en los otros siete, según los datos preliminares.

El resultado electoral presenta «un país totalmente dividido en dos posturas dramáticamente separadas», expresó al Canal 12 de la televisión local el diputado y dirigente de ARENA, Edwin Zamora.

El presidente de la Asamblea Legislativa y dirigente del FMLN,

Sigfrido Reyes, también admitió esa división, y alertó que la población que no votó por su partido «no puede ser excluida, ni se puede gobernar sólo para la mitad de la sociedad».

A juicio de Reyes hay un sector de votantes con una clara posición de progreso para el país y por ello respaldó la propuesta del FMLN, y otro sector claramente conservador que, dijo, tiene un temor a los cambios.

El presidente de la firma encuestadora mexicana Mitofsky, Roy Campos, comentó por su parte a Telecorporación Salvadoreña que Sánchez Cerén debe «entender que la mitad» de la población le dijo no a su opción.

Un futuro Gobierno de Sánchez Cerén está obligado a dar garantías a todos los salvadoreños y entender «que él mismo tiene que correr un poco al centro (…) y no irse al extremo izquierdo», opinó Campos.

El director regional de la Organización de Estados Iberoamericanos, Ricardo Cardona, comentó el viernes pasado a Efe, dos días antes de los comicios, que aunque el ambiente electoral era de tranquilidad existía aún un alto grado de polarización en el país.

Cardona resaltó que cualquier Gobierno que llegue va a tener la necesidad de concertar con amplias fuerzas políticas y económicas del país, incluyendo a sus opositores.

Sánchez Cerén aseguró el domingo por la noche en su discurso en el mitin donde se proclamó ganador, que está abierto a trabajar en función de todos, y que comprendía el mensaje del pueblo salvadoreño en la elección del domingo, que era buscar un entendimiento con todos los sectores».

Quijano, que también se ha proclamado como el triunfador, dijo estar dispuesto al diálogo con el FMLN para construir una gobernabilidad para el país.

«ARENA no puede gobernar sola, necesita al FMLN», y viceversa, porque ambos partidos se necesitan por ser las dos principales fuerzas políticas del país, subrayó el candidato opositor.

Sánchez Cerén considera su triunfo como irreversible a pesar del margen tan estrecho de 0,22 puntos que posee y que está lejos de los 10 a 18 puntos que vaticinaban las encuestas para la segunda vuelta.

El candidato oficialista le ganó a Quijano en la primera ronda por casi 10 puntos, pero al no superar el 50 % de los votos obligó a la segunda vuelta.

Quijano anticipaba que los últimos sondeos antes de la cita con las urnas, no publicados por prohibición legal, indicaban que iba a revertir la derrota y a triunfar este domingo.

 

Más noticias