ATENAS, Grecia.- La policía húngara detuvo a cinco ucranianos sospechosos de tráfico de personas por transportar a 25 migrantes de Pakistán y Afganistán hacia Austria.
Los migrantes viajaban en una de las dos camionetas con matrícula lituana a las que la policía dio el alto el jueves en una carretera cerca de la ciudad occidental de Szombathely, a unos 15 kilómetros (9 millas) de la frontera austriaca.
En otro caso, la policía dijo haber detenido a un hombre austriaco de 49 años cerca de la localidad norteña de Tata, después de que se le diera el alto con seis ciudadanos sirios, dos de ellos menores, en su auto. Los sirios se habían registrado ante las autoridades húngaras y solicitado asilo, pero no tenían los documentos necesarios para abandonar el país.
Hungría había registrado unas 17.500 solicitudes de asilo este año hasta mediados de mayo, pero la mayoría de los solicitantes de asilo se marchan hacia la Europa occidental antes de que se decidan sus casos.
La policía en el este de Alemania buscaba a tres hombres de un grupo, después de que se difundiera un video en el que se los vía expulsando a un migrante iraquí de un supermercado.
El iraquí de 21 años discutía con los empleados del supermercado por una tarjeta telefónica defectuosa el pasado 21 de mayo, en Arnsdorf, indicó la policía de Goerlitz a la agencia de noticias dpa. Entonces, los tres hombres vestidos con camisetas negras irrumpieron en el lugar, agarraron al migrante y lo sacaron fuera, donde lo ataron a un árbol con bridas de plástico.
Los hombres huyeron ante la llegada de la policía.
El periódico Bild difundió el jueves un video del incidente, que según dijo circulaba por sitios web de ultraderecha.
La policía buscaba a testigos que pudieran identificar a los hombres. También investigaban al migrante, que según empleados del supermercado amenazó al personal de la tienda con una botella.
Tres migrantes fueron hospitalizados por heridas sufridas durante un altercado durante la noche en un campo de detención en la isla de Lesbos, según dijeron el jueves las autoridades griegas.
Los enfrentamientos entre grupos migrantes se produjeron de madrugada, y también provocaron un incendio que calcinó un contenedor de mercancías que se había reconvertido en alojamiento, indicó la policía.
Se trata del último episodio de violencia en el campo de Moria de la isla griega, donde hay más de 2.500 personas retenidas desde el acuerdo de marzo entre la Unión Europea y Turquía para deportar a migrantes y refugiados.
Las deportaciones se han visto retrasadas por demoras en el proceso de revisión del asilo, lo que provoca frecuentes choques en los campos de Lesbos y la vecina isla de Chios.
