Santo Domingo, RD. – La Policía Nacional en Santiago apresó a una mujer que retiró de una entidad bancaria la suma de 43 mil pesos, producto de una estafa realizada al expelotero de Grandes Ligas y líder de hits en la República Dominicana, Luis Polonia. El destacado beisbolista hizo el depósito en dos partidas. La primera de 18 mil 700 y luego una de 24 mil 700 pesos.
Los depósitos se realizaron a nombre de una persona identificada como Mabel Gutiérrez y retirados por ella misma, con la intención maléfica de que sería utilizado por su amigo Bernardo Toribio, para pagar un tanque de comida de los que envían desde Estados Unidos y el alquiler de un vehículo, ya que supuestamente se encontraba en el país.
La Policía dice que el robo fue realizado mediante llamadas telefónicas, en las cuales los desaprensivos usurparon la identidad de un amigo de Polonia, hasta lograr depósitos en varios montos.
Pero, ¿cuántas personas son estafadas a diario con este mismo modus operandi? La respuesta no se sabe con certeza, pero, son muchas las denuncias que llegan a los medios de comunicación de personas sin ningún nivel de influencia que son estafadas a través de las plataformas digitales.
El caso de Fernando Álvarez
Tal es el caso del señor Fernando Álvarez, quien escribió a este medio para denunciar que también estuvo cerca de ser estafado “por las mismas personas que timaron a Luis Polonia”.
Cuenta que desaprensivos suplantaron la identidad de unA AMIGA residente en Panamá y le hackearon el teléfono, para contactarlo a través de WhatsApp, y decirle, haciéndose pasar por su amiga, que le enviarían dos maletas y un tanque, pero que debía pagar 10 mil pesos del envío.
Dice que estaba confiado, pues en el perfil estaban todos los datos de su amiga, pero algo falló. El hombre comenta que no tenía dinero para pagar el envío, razón por la que se vio en la necesidad de sugerir que la entrega se hiciera a otra persona. En lo que se averigua a quién se le podría enviar, Álvarez pensó en otro problema: no quería tener esos artículos en su casa.
Es por ello que les envía un audio a los malhechores, informándoles que llamaría a su amiga para que buscara a otra persona que pueda recibir el envío. A partir de ese momento, asegura que los delincuentes no volvieron a escribirle, y hasta lo bloquearon de WhatsApp. Solo quedaron los mensajes que compartieron y el número (809-856-6264) de un sujeto, llamado Jorge Espress, a quien debía depositar el dinero.
