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Protestan en Roma contra inmigrantes y la Unión Eurpea

Roma. El líder de la Liga del Norte llevó el sábado su prédica antieuropea y antiinmigrante a Roma, donde llenó una enorme plaza con millares de partidarios. Asimismo proyectó su movimiento regional como una futura fuerza derechista a nivel nacional.

Procedentes del norte, los partidarios de Matteo Salvini se congregaron en la Piazza del Popolo. La policía bloqueó las calles conducentes a la plaza para impedir que manifestantes opositores chocaran con los simpatizantes de Salvini.

La Liga del Norte fue un bastión del líder conservador Silvio Berlusconi, pero mientras este trata de mantener su influencia después de una condena por fraude impositivo que lo desplazó del parlamento, Salvini ha buscado nuevos aliados, incluso de la ultraderecha.

Los ataques de Salvini a la Unión Europea suscitaron comparaciones con Marine Le Pen, líder del Frente Nacional. Como algunas encuestas de opinión señalan que el nivel de popularidad de Salvini le sigue al del primer ministro Matteo Renzi, ha sido calificado como «el otro Matteo».

Salvini dijo a sus partidarios que Renzi es el «sirviente insensato» de Bruselas, «que quiere controlar las vidas de todos ustedes». Salvini propuso «una Europa diferente donde los bancos cuenten menos y los ciudadanos y pequeños comercios cuenten más».

En las próximas elecciones regionales Salvini podría capitalizar la fuerza creciente de otros movimientos derechistas en Europa, especialmente después de los ataques recientes de extremistas islámicos. Contrabandistas con sede en Libia traen embarcaciones repletas de migrantes y refugiados a Italia. Otro líder de la Liga en la manifestación, Mario Borghezio, dijo que los inmigrantes desempleados «deberían salir todos» de Italia.

Aldo Cazzullo, comentarista del Corriere della Sera, escribió que mientras la Liga había desdeñado anteriormente a Roma como «el enemigo», ahora su enemigo «es Europa, Alemania, la divisa común, las finanzas internacionales». Agregó que han impulsado la popularidad de Salvini la incapacidad de Europa para lidiar con «el empobrecimiento de la clase media, olas de inmigrantes, la guerra en las otra costa del Mediterráneo».

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