Nueva York, la ciudad que nunca duerme estaba extrañamente tranquila este martes 27 de enero. En el segundo día de una tormenta de nieve que paralizó la Gran Manzana y otras ciudades importantes en Estados Unidos, millones de estadounidenses permanecieron en casa bajo orden de los responsables por medidas de precaución, mientras que miles de vuelos se cancelaron, aunque la tormenta fue menos de lo que han previsto las autoridades.
En cuanto al tráfico, fue prohibido por las autoridades que tuvieron que tomar medidas drásticas. El alcalde Bill de Blasio y otros responsables llamaron al pueblo a salir lo menos posible de sus hogares, también anunciaron que las escuelas permanecerán cerradas el martes. Podría ser una cuestión de vida o muerte, y no es dramatizar, hay que tener cuidado», dijo por su parte el gobernador del Estado de Nueva York, Andrew Cuomo.
Lunes por la noche, puentes y túneles fueron cerrados, metros y autobuses quedaron paralizados, y nadie tenía derecho a circular en la ciudad, a excepción de los vehículos de emergencia como ambulancias o quitanieves. Mientras tanto, sigue la alerta en siete estados como Neva York, Boston, Connecticut, Rode Island, Massachusetts, New Hampshire y New Jersey.
*Johanne Dimanche, estudiante de Comunicación Social de la PUCMM.
