El gobierno de Ucrania difundió a sus ciudadanos un manual de supervivencia de guerra para los habitantes ucranianos. La guía, publicada en la página web del Ministerio de Defensa de Ucrania, ha servido de referencia para que miles de ucranianos puedan sobrevivir a la invasión de Rusia.
Vale la pena recordar que una buena preparación es clave para la supervivencia. Por ello, en este artículo encontrará los consejos suministrados por el gobierno de Ucrania en situaciones de emergencia y de conflicto armado. Es este el material de consulta que utilizan los habitantes ucranianos para apoyarse en su supervivencia.
Manual de supervivencia en caso de guerra que ha difundido el Gobierno de Ucrania
¿Qué hacer después de escuchar las sirenas antiaéreas?
Si escucha sirenas o pitidos intermitentes durante varios minutos, se trata de una señal de alarma, por lo que deberá:
- Encender la televisión o la radio, ya que se transmitirá información sobre el incidente, a través de los canales oficiales, cinco minutos después del inicio de la alarma.
- Seguir las instrucciones del mensaje.
- Mantener la televisión o la radio encendida, ya que puede llegar más información.
Después de recibir la notificación de alarma, existen dos escenarios posibles:
- Quedarse en casa: Será necesario adaptar nuestro hogar. Asimismo, es de vital importancia compartir la información con nuestros vecinos y ayudar a los que lo necesiten.
- Trasladarse a un refugio o evacuar la zona: Antes de salir de la vivienda, debemos cerrar el suministro de gas, electricidad y agua, además de las ventanas y las rejillas de ventilación. Asimismo, será necesario contar con un equipo de protección respiratoria (mascarillas) y una serie de elementos claves (mochila de emergencia). Por último, debemos dirigirnos a un refugio o reunirnos con un grupo de evacuación y ayudar a los que lo necesiten.
Consejos para preparar nuestro hogar
- Si es posible, averiguar dónde están los refugios. En caso de disponer de sótano en la vivienda, asegurarse de que se encuentra en buen estado antes de su uso.
- Verificar la presencia de una salida de emergencia.
- Recolectar grandes cantidades de agua potable y productos no perecederos para tener reservas en caso de largos periodos de aislamiento.
- Contar con un botiquín de primeros auxilios y pensar qué medicamentos se pueden necesitar a largo plazo.
- Preparar extintores de incendios.
- Hacer acopio de medios alternativos de iluminación, como linternas o velas. Esto por si se llegaran a producir cortes de energía.
- Tener preparada una mochila de emergencia y los documentos más necesarios (carnet de identidad o pasaporte y escrituras de la vivienda) en caso de evacuación urgente.
- Contar con medios para poder cocinar en ausencia de gas y electricidad, como hornillos portátiles.
- Velar por el buen estado de nuestro transporte privado y contar con combustible en caso de evacuación urgente de la zona.
- En estaciones frías, debemos pensar en formas alternativas de calefacción para la casa, por si se produjeran cortes en los suministros, como madera o mantas.
Cómo preparar la mochila de emergencia
- Alrededor de 4 litros de agua por persona y día y un suministro de alimentos no perecederos para, al menos, tres días. Aunque los servicios de emergencia suelen facilitar alimentos y bebidas, puede que pasen horas hasta que podamos acceder a ellos, asimismo el agua es necesaria tanto para mantenernos hidratados, como para mantener una correcta higiene personal.
- Si padecemos alguna enfermedad es de vital importancia hacer acopio de todos los medicamentos que necesitemos para el correcto funcionamiento de nuestro cuerpo.
- Para poder comunicarnos tanto con los servicios de emergencia como con nuestros familiares y amigos y estar informados de los comunicados oficiales sobre la situación, es necesario incluir un teléfono móvil y su respectivo cargador. Aunque es posible que las comunicaciones se vean interrumpidas, por ello se recomienda también llevar una radio con pilas, para poder mantenerse informado en todo momento.
- Otro de los elementos importantes que no debemos olvidar son los documentos oficiales, como el pasaporte o el libro de familia. Asimismo es recomendable conservar las escrituras de la vivienda y copias de las pólizas de seguro y los registros de nuestras cuentas bancarias.
- Nuestra vestimenta también es muy importante, debemos llevar con nosotros como mínimo algo de ropa interior, un pijama, algo de abrigo y un calzado resistente.
- Igualmente, es recomendable guardar en nuestro kit un pack de toallitas húmedas, además de un cepillo de dientes y un peine para poder mantener nuestra higiene de manera óptima.
- Por último, no debemos olvidar llevar en nuestro kit una linterna, si es de manivela o solar mejor. Esto para poder desplazarnos con seguridad por la zona afectada por la catástrofe y una navaja suiza para poder hacer uso de los alimentos.
Cómo proceder si nos encontramos en una zona de combate o en una situación de emergencia
- No informar sobre nuestras acciones y planes futuros a extraños, así como a aquellos con una reputación cuestionable.
- Averiguar dónde podemos conseguir alimentos y dónde se encuentran los refugios más cercanos.
- No discutir con extraños, evitando así posibles provocaciones.
- Al evacuar unas instalaciones, debemos dejar pasar primero a los más necesitados, esto ayudará a evitar aglomeraciones.
- En caso de recibir información por los canales oficiales de las autoridades estatales sobre el posible peligro, comunicárselo a otras personas: familiares, vecinos, compañeros…
- Mantener un registro del tipo de sangre (nuestra y de nuestros parientes cercanos) e información sobre posibles problemas de salud (como alergias a medicamentos o enfermedades crónicas).
- Permanecer el menor tiempo posible fuera de casa y del trabajo, reduciendo el número de viajes sin motivo y evitando los lugares concurridos.
- Portar siempre un documento de identidad.
- En caso de encontrarnos con personas armadas, equipo militar o disturbios, debemos abandonar el área inmediatamente, si tenemos oportunidad.
- Evitar pararnos cerca de vehículos militares.
- Informar a los organismos encargados de hacer cumplir la ley, las autoridades locales y el ejército sobre las personas que cometen acciones ilegales.
- Si ingresáramos a un área que está siendo bombardeada, deberemos escondernos en el refugio más cercano. No salir hasta que haya pasado un buen rato.
- Si no existiera ningún refugio cercano, podremos hacer uso del terreno (zanjas, trincheras…).
- En caso de bombardeo repentino y falta de refugio, acostarse en el suelo con la cabeza en dirección opuesta a las explosiones y cubrirse la cabeza con las manos u otros objetos.
- Si una persona resulta herida cerca nuestra, deberemos brindarle primeros auxilios y llamar a una ambulancia o incluso, si es necesario, el ejército. No obstante, no debemos de tratar de ayudar a los heridos hasta que termine el bombardeo.
- Si hemos presenciado alguna muerte, así como actos indebidos (como arrestos o secuestros), debemos de tratar de conservar la mayor cantidad de información posible sobre las circunstancias de los hechos.
Cómo proceder durante un tiroteo
El manual de supervivencia de guerra recomienda que, se producen disparos al aire libre, lo mejor que podemos hacer es arrojarnos al suelo y cubrirnos la cabeza con las manos. Para protegernos podremos hacer uso de cualquier saliente como, por ejemplo, una zanja, un cubo de basura de hormigón o unas escaleras. No obstante, debemos evitar escondernos detrás de automóviles o quioscos, ya que a menudo se convierten en el objetivo de los disparos.
Dondequiera que esté, su cuerpo debe estar en la posición más segura posible, y la más recomendable es la posición fetal. Asimismo, deberemos cubrirnos la cabeza con las manos y abrir la boca para que, en caso de una explosión cercana, nuestros tímpanos no se vean afectados. Por último, para poder escapar de la zona de forma segura, esperaremos hasta que el tiroteo finalice y no haya disparos durante al menos 5 minutos.
Cómo proceder durante un bombardeo
Recomienda el manual de supervivencia de guerra Si se interpone en nuestro camino fuego de artillería, fuego de mortero o un bombardeo aéreo, deberemos acostarnos inmediatamente en el suelo. Preferiblemente cerca de un saliente, o al menos en una depresión del terreno.
Las estructuras de hormigón (que no se puedan derrumbar o incendiar), las zanjas, los pozos poco profundos y los canalones anchos pueden brindarnos una gran protección. Asimismo, deberemos cubrirnos los oídos con las palmas de las manos y abrir la boca, esto nos protegerá de sufrir un barotrauma, provocado por cambios barométricos, en este caso, por las explosiones, precisa el manual de supervivencia de guerra.
