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‘Flakka’, la peligrosa droga sintética con efectos “devastadores” que tiene en alerta a las autoridades de EE.UU.

'Flakka', la peligrosa droga sintética con efectos “devastadores” que tiene en alerta a las autoridades de EE.UU.
'Flakka', la peligrosa droga sintética con efectos “devastadores” que tiene en alerta a las autoridades de EE.UU.

Las autoridades de EE.UU. han dado la voz de alarma por la proliferación de una nueva droga sintética conocida como la «flakka«, más barata que la cocaína pero también mucho más peligrosa y con efectos «devastadores» para quien la consume.

Desde que fue detectada por primera vez en Florida, hace apenas nueve meses, esta nueva droga sintética ha matado, sólo en Miami, un total de 32 personas, pero las llamadas a los centros de urgencias no paran de crecer y la Policía se ha visto obligada a poner en marcha campañas informativas alertando del fenómeno.

Autoridades policiales del Condado de Broward, al norte de Miami, han asegurado que desde que empezó el año se han registrado más de 500 incidentes relacionados con esta droga, cuyo bajo coste (diez veces menor que la cocaína) ha disparado su consumo entre los jóvenes.

Según la policía, que se ha visto sorprendida por la rápida proliferación de este narcótico, la «flakka» proporciona una «fuerza sobrehumana al que la consume», con fuertes episodios de paranoia, ansiedad, psicosis y alucinaciones, y puede causar la muerte por fallo renal o cardíaco.

Las llamadas por casos de uso de «flakka» se han disparado en las centralitas de los centros médicos y de la Policía, que en muchas ocasiones deben hacer frente a situaciones «impredecibles y peligrosas».

En algunos casos, las personas que consumen esta droga sufren un estado de hipotermia que les impulsa a desnudarse, y en otras alucinaciones que les llevan a huir o atacar a supuestos perseguidores.

La droga, originaria de China, puede fumarse, ser esnifada o inyectada y produce una reacción inmediata, con efectos en el corazón y en el cerebro que pueden ser permanentes y conducir a un infarto.

Las pruebas realizadas en el laboratorio criminal del sur de la Florida han confirmado que las sustancias incautadas en los últimos meses tenían el componente Alpha PVP, también conocida como «Flakka», derivada de la metilendioxipirovalerona (MDPV), también denominada «droga caníbal».

Los especialistas sanitarios se han sorprendido por la forma en que esta droga «destruye el cuerpo» una vez que el consumidor entra en la etapa que se llama «Excited delivirium» (Delirio con excitación), elevando de manera muy rápida la temperatura corporal.

Esta misma semana autoridades policiales y sanitarias del sur de Florida iniciaron una campaña de concienciación para alertar del peligro de esta droga y solicitar la colaboración de los ciudadanos.

La “flakka,  al mismo valor de una hamburguesa

El teniente de policía en la ciudad de Weston (Florida), Rafael López, comentó que necesitan la colaboración ciudadana para tratar de acabar con la circulación de estos estupefacientes, cuyo coste no sobrepasa los cinco dólares, mismo valor de una hamburguesa.

«Tenemos que acudir a la comunidad con tal de evitar que la gente, especialmente los jóvenes, use estas drogas», comentó.

Las comunidades también están colaborando en esta campaña informativa, y algunos activistas confiesan su preocupación al ver «lo fácil que es introducirlas en los EE.UU. y lo fácil que es comprarlas».

Algunos vecinos que han podido asistir a las reuniones con la policía y han visto vídeos de personas que han consumido la droga, aseguran que han quedado «en un estado de shock» al comprobar los efectos que provoca el narcótico en las personas.

En Coral Gables, al sur de Miami, los responsables de un centro terapéutico de recuperación de adictos a los estupefacientes insistieron también en la necesidad de «concienciar a los jóvenes» de los efectos irreversibles que puede generar la ingesta de este tipo de sustancias.

«Los jóvenes son los más vulnerables, poner en su conocimiento la gravedad de esta droga puede ser esencial para que no se propague entre este colectivo», comentó Alfredo Hernández.

Daniel, un joven de 31 años que tuvo problemas de drogodependencia, aseguró que «no vale la pena» probar este tipo de drogas por las consecuencias que conlleva.

«Se van a ahorrar un montón de problemas físicos y emocionales. Uno de los errores que yo cometí en esa edad, cuando me sentía mal emocionalmente, fue no haber ido a mi familia a pedir ayuda», comentó Daniel, que vive con «miedo a recaer» y «regresar al estilo de vida que tenía cuando consumía».

Su terapeuta advirtió que “una persona adicta puede terminar de tres formas, y solamente tres: en un hospital, en la cárcel y en la tumba».

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