La seguridad ciudadana se manifiesta en un entorno de convivencia pacífica de la sociedad, que permite a la población disfrutar adecuadamente de los espacios públicos. Las tasas de homicidios, robos, violaciones, secuestros por cada 100 mil habitantes son algunos indicadores que se utilizan para determinar las condiciones de seguridad ciudadana.
En los Estados Unidos se ha estudiado mucho cuáles factores influyen sobre la seguridad ciudadana. Específicamente se ha analizado el descenso en la tasa homicidios que se registró durante los años noventa.
Algunos autores afirman que el crecimiento económico ayuda a reducir la criminalidad. Una población empleada disminuye la propensión a cometer delitos de diversas índoles. En la ciudad de Nueva York por cada punto en que se redujo el desempleo entre 1992 y 1999 se logró disminuir en 2.2 puntos porcentuales la tasa de robos. El aumento del salario real también ayuda a reducir los asesinatos y los robos.
Otros autores señalan que el aumento de la tasa de arresto -y la eficiencia de la Policía- también explica la reducción de la tasa de robos y de homicidios. En ese contexto, Steven Levitt, profesor de Economía de la Universidad de Chicago, sostiene que el incremento en el número de policías -bien entrenados, bien remunerados y con tecnología avanzada- es un factor clave a favor de la reducción del crimen.
Esos estudios permiten concluir afirmando que políticas que promuevan el empleo y el crecimiento económico, unidas a una estrategia de modernización de la Policía, se traducirán en fuerzas que tiendan a mejorar la seguridad ciudadana en la República Dominicana. Un resultado de alto impacto en una economía basada en el turismo.
