«Resulta muy sorprendente que, después de un período de atención extremadamente alto sobre Alepo por parte de las organizaciones internacionales que llevan a cabo desminados humanitarios, haya pasado un mes sin que hayan ofrecido iniciativas para prestar ayuda a la población de la ciudad», ha afirmado hoy el portavoz del Ministerio de Defensa de Rusia, el general Ígor Konashénkov.
Asimismo, el portavoz dijo estar seguro de que el Servicio de Naciones Unidas de Actividades Relativas a las Minas (UNMAS, por sus siglas en inglés) y el Centro Internacional de Desminado Humanitario de Ginebra saben que desde el pasado mes de diciembre se puede trabajar en Alepo sin riesgo para la vida y que todas las vías que llevan a la ciudad son «absolutamente libres y seguras».
Konashénkov también ha asegurado que esto es conocido por otras oficinas de las Naciones Unidas, como la de Coordinación de Asuntos Humanitarios y el Fondo de la ONU para la Infancia, organismos clave para la organización de ayuda a los heridos en conflictos bélicos.
El 15 de diciembre concluyó la liberación de la ciudad siria de Alepo con la recuperación de los barrios orientales de la ciudad por parte del Ejército sirio. El Ministerio de Exteriores de Turquía estima que alrededor de 37.000 personas han sido evacuadas en el marco de esta operación humanitaria.
