El presidente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Leonel Fernández y el secretario general, Reinaldo Pared Pérez, llevan 14 y 15 años en sus cargos, respectivamente, mandatos que han sido prorrogados hasta el 2020 gracias a componendas internas.
El PLD es el principal partido del sistema a juzgar por sus seis victorias consecutivas, cuatro presidenciales y dos congresuales y municipales, y es la entidad que menos aplica la elección popular.
Pared Pérez tiene garantizado por lo menos 19 años en el cargo y Fernández 18. Desde el 2012 no se someten al escrutinio de las bases. Previamente en el 2009 un plebiscito le había prorrogado el mandato.
El ex mandatario es el único presidente que ha tenido el PLD desde la muerte de Juan Bosch en el 2001. Asumió el cargo en el 2002 y no ha necesitado de un congreso elector para continuar dirigiendo la organización morada con la estrella amarilla.
Los acuerdos de aposentos en el PLD también arrastran a dirigentes medios y a los cargos electivos.
Para garantizar la reelección presidencial, Danilo Medina tuvo que pactar con Leonel Fernández el continuismo de los diputados, senadores y alcaldes.
Esto provocó que algunos legisladores con aspiraciones mayores como Víctor Sánchez y Milcíades Franjul tuvieran que mudarse al Partido Revolucionario Moderno.
El PLD tiene por práctica que solo los nuevos integrantes del Comité Político son sometidos a escrutinio en congresos electorales. Los que ya han sido elegidos simplemente son ratificados y ya.
Esto contradice el artículo 5, acápite I de los estatutos que establece: “La consulta a las bases se considera como un mecanismo de participación de todo el Partido en la elaboración de la línea política organizativa y programática, así como en la elaboración y aplicación de los planes de trabajo”.
La práctica sugiere que en el partido en el Gobierno la democracia está secuestrada.
Etimológicamente la democracia proviene del griego: “demos”, que puede traducirse como «pueblo») y “cracia” que significa “elección”, o sea….“gobierno elegido por el pueblo”.
Surgió en Atenas en el Siglo V antes de Cristo, cuando los ciudadanos depositaron en dos recipientes piedras blancas y negras para decidir si debían o no ir a la guerra con el ejército del Imperio Persa.
25 siglos después el gobernante PLD desconoce esta práctica.