Centenares de familiares de las víctimas del vuelo MH370 se han manifestado ante la embajada malasia en Pekín para denunciar la gestión de la crisis por parte las autoridades malasias. Según ellos, el Gobierno del país asiático no ha contado toda la verdad y ha aportado datos falsos, queriendo zanjar el asunto sin dar ninguna prueba sobre la muerte de los 227 pasajeros del avión.
Las autoridades malasias han anunciado que el aparato desaparecido el 8 de marzo se estrelló en el océano Índico y que no hay esperanzas de encontrar supervivientes. Una explicación que no convence al Gobierno chino, que quiere verificar los datos en los que se basa Kuala Lumpur.
“Nuestra prioridad por el momento es encontrar los restos y averiguar que es lo que le pasó al avión antes de hacer una declaración pública. Ahora todos los esfuerzos se concentran en esa zona del sur del océano Índico”, declaraba el primer ministro de Malasia Najib Razak.
Según anunció el lunes el Gobierno malasio, los últimos datos de satélite aportados por la compañía británica Inmarsat muestran que la última posición del Boeing 777 fue al oeste de Perth, en el sur del océano Índico.
El mal tiempo en esa zona ha obligado a las autoridades australianas a suspender la búsqueda de los restos del avión. Uno de los buques militares de ese país ha tenido que cambiar su rumbo debido al fuerte oleaje y los aviones que estaban oteando el área han tenido que retirarse hasta que el clima mejore.
Fuente: Euronews
