Yongki, un famoso elefante de Indonesia, fue asesinado y despojado de sus colmillos. Así lo anunció este lunes un funcionario del Parque Nacional Timbul Batubara, en la isla Sumatra, donde vivía. Y las redes sociales, como Twitter, no han tardado en hacerse eco de la noticia.
Con 35 años a su espalda, Yongki, un elefante entrenado, había participado en patrullas para evitar que los elefantes salvajes saqueasen pueblos. Asimismo, combatía a los cazadores furtivos que amenazan a los animales de las selvas tropicales de Indonesia.
De acuerdo con un funcionario de Timbul Batubara, el cuerpo del animal fue encontrado cerca del campamento donde habitaba. Sus largos colmillos de un metro se habían echo añicos, y en las piernas aún quedaban restos de las cadenas utilizadas por sus entrenadores para asegurarse que no escapara del campamento.
Se estima que en Sumatra hay alrededor de 3.000 elefantes salvajes. Estos son, con frecuencia, el blanco de los cazadores furtivos debido a sus colmillos de oro –muy usados en la medicina tradicional china–
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), una organización no gubernamental, clasifica a este elefante entre las especies en peligro de extinción.
En el cuerpo del animal no se han encontrado rastros de herida de bala. No obstante, su lengua estaba azul, lo que sugiere que podría haber sido envenenado.
La noticia de la muerte de Yongki incendió las redes sociales. Por ellas circularon fotos de su cadáver y comentarios acompañados de la etiqueta #RIPYongki («Descanse en paz, Yongki»).
