El Departamento del Tesoro de Estados Unidos confirmó la entrega de US$555 millones a Irán como parte del acuerdo alcanzado sobre el programa nuclear de Teherán.
Se trata de la primera fracción del pago total de US$4.200 millones de los ingresos por venta de petróleo iraní que fueron congelados.
El dinero, así como el levantamiento temporal de algunas sanciones internacionales que pesan sobre el país, se entrega a cambio del compromiso iraní de detener o limitar su programa de enriquecimiento de uranio.
Potencias mundiales, y sobre todo Estados Unidos, temen que este programa sea utilizado para fabricar una bomba nuclear. Dentro de seis meses se espera llegar a un acuerdo más concluyente.
