Santo Domingo, RD.- Ciudadanos haitianos en el país han desplazado a dominicanos no solo en la construcción, sino, también, en otros oficios como el transporte, ventas ambulantes y servicios.
Esta historia cuenta cómo es la vida de quienes logran cruzar la frontera, sea legal o de manera irregular.
Raymond llegó hace 19 años al país a realizar la labor que, en ese entonces, concentraba la mayor mano de obra haitiana: cortar caña.
Ya con esposa e hijo en Buenos Aires de Herrera continúa viviendo de la caña, pero ahora la vende en las calles.
En las principales intersecciones de la capital Dominicana en común verlos vender, ofrecer servicios de transporte como el motoconcho o, incluso, pedir ayudas.
Este adolescente tiene 5 años vendiendo de parada en parada, pero su anhelo era ser profesional.
Revelan cómo suelen valerse de las debilidades en los controles migratorios del país para cruzar frecuentemente hacia Haití para llevar recursos a sus demás familiares.
Los haitianos que se han establecido en República Dominicana, en su mayoría de forma irregular. Además se concentran en la construcción y zonas turísticas, aunque no faltan quienes prefieran irse por la vía más fácil y dedicarse a delinquir.
Por Karelyn Cuevas
