La tragedia ocurrida en Salcedo, provincia Hermanas Mirabal, donde adultos y niños de una comparsa ardieron en llamas, vuelve a encender el debate sobre el uso indiscriminado de fuegos artificiales en el país.
Envueltos en llamas corrían despavoridos niños, jóvenes y adultos en lo que sería el colorido cierre del carnaval de Salcedo, terminó como trama de terror.
Un día después a este pueblo lo embarga la tristeza y muchos cuestionan la falta de controles para la adquisición de fuegos artificiales.
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Las autoridades locales y encargados de la actividad cultural aseguran desconocían la existencia de la pirotecnia que detonó.
La alcaldesa del municipio de Salcedo, María Mercedes Ortiz, aseguró que no estaba autorizada la utilización de fuegos artificiales en el carnaval.
Unos 8 adultos y 10 menores luchan por salvarse en una cama de hospital.
El fuego los arropó y desesperados los integrantes de la comparsa “Toros y Toritos” buscaban deshacerse de sus trajes. Quienes presenciaron la escena, cuentan lo traumático que fue.
El Ministerio Público avanza las pesquisas para esclarecer lo sucedido.
Resta esperar que se establezcan responsabilidades, pues la maniobra no regulada de fuegos artificiales, con las terribles consecuencias que provocó, no debe escapar a las sanciones de ley.
