SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Las autoridades retiraron los equipos pesados y el personal que laboraba en la extensión de la segunda línea del Metro Santo Domingo.
Por tal motivo, las familias que fueron censadas en el sector Gualey para ser reubicadas y dar paso a la vía ferroviaria, ahora se quejan porque no saben cuál será su destino tras el recorte del presupuesto para dicho organismo del transporte en más de un 50%, lo que impedirá continuar los trabajos de la extensión de la segunda línea.
En la rotonda de la cabeza del Puente de la 17, en el lado oriental, solo quedaron algunos de los equipos y la verja de metal que servía de protección. Este miércoles, policías de puesto vigilaban el lugar para que no se lleven nada.
Del otro lado del río Ozama, los vecinos que fueron censados miran con tristeza el retiro de las maquinarias. Se quedaron esperando su desalojo.
Dueños de talleres y chiriperos ahora no saben qué hacer porque les dicen que “el asunto va”, pero más adelante.
Mientras, miles de personas enfrentan múltiples dificultades para cruzar cada día hacia el Distrito Nacional y viceversa, por falta de este servicio de transporte.
Los debates
Apenas ayer, el presidente de la Cámara Dominicana de la Construcción, Diego de Moya Canaán, advirtió al presidente Danilo Medina, sobre el costo político negativo que tendría para su gobierno la paralización de los trabajos de continuación de la referida obra.
La semana pasada, organizaciones comunitarias y populares del municipio Santo Domingo Este marcharon hasta el Congreso Nacional donde, a ritmo de tambores y consignas, reclamaron la continuación de la extensión de la línea II del Metro de Santo Domingo.
Los manifestantes reclamaban la modificación al otrora proyecto de Presupuesto General del Estado para 2014, para se incluyeran las partidas para la ampliación del Metro de Santo Domingo.
