Dajabón, RD. – Productores de arroz de la zona fronteriza de Dajabón expresan su preocupación ante la difícil situación que vienen enfrentado con el trasiego masivo de ilegales haitianos hacia el territorio dominicano, los cuales causan daños al cultivo de arroz y a la verja Fronteriza en Dajabón.
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Según denuncian los agricultores de La Vigía, Sánchez y otras comunidades de la frontera, los indocumentados estarían causando grandes daños al cultivo de arroz. Esto debido a que estos utilizan las fincas para cruzar en masa hacia la República Dominicana.
Si, estamos feos aquí, una pérdida masiva. Yo le solicito al gobierno que haga algo. Los haitianos están cruzando por el muro, están rompiendo el muro. Los trabajadores de aquí lo tapan y ellos van de noche y lo rompen.
Dijeron productores de arroz.
Explicaron que más de 300 haitianos pasaron el lunes a territorio dominicano por la verja perimetral.
El lunes en horas no preciada de la noche pasaron supuestamente, según nos han informado los haitianos que trabajan con nosotros, más de 300 o 400 haitianos, donde ellos violaron la verja perimetral que el gobierno está haciendo, la seguridad de los guardias y levantaron la verja y pasaron hacia este lado. Ayer en el día encontramos chancletas, utensilios de ellos que dejaron botados. Aquí hubo una destrucción masiva de plantas de arroz, al ellos cruzar por la finca.
Dijo un productor de arroz.
El flujo masivo de ilegales por esta parte de la frontera ha creado además una gran preocupación para los habitantes de la zona. Esto debido a que los extranjeros están rompiendo las mallas del muro fronterizo recién construido por el gobierno con la intención de evitar la migración de los haitianos.
Según se pudo notar en un recorrido realizado por CDN los ilegales están destruyendo la verja fronteriza la cual se suponía sería la solución al problema migratorio. Sin embargo según obreros de la obra ya están cansados de arreglarla pero los ilegales vuelven a romperla.
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«Los haitianos lo que tienen es un desastre con esta malla aquí. Uno la arregla hoy y cuando uno vuelve al otro día ya la han picoteado con una pinza. Pasan truya de a 200, 300 y 400, y cuando pasan por una parcela se llevan el arroz que está recién sembrado en los pies». Dijo un obrero del muro fronterizo.
Por Ramón Medina
