SANTO DOMINGO, RD.- Las inmediaciones del Palacio de Justicia del Distrito Nacional, donde se conocerá por tercera ocasión la solicitud de medida de coerción a los implicados en el presunto entramado de corrupción administrativa, desmantelada en la Operación Calamar, se encuentra bajo un fuerte contingente policial, mientras varios camiones de la Policía Nacional continúan llegando con verjas perimetrales y vallas metálicas, para reforzar aún más la seguridad del perímetro.
Los agentes policiales están apostados a dos esquinas del cuadrante del Palacio de Justicia, es decir, desde la estación de combustibles Shell, ubicada en la avenida Independencia con la calle Peynado frente a la clínica Abreu, así como y la Arzobispo Portes.
Estas medidas son tomadas para evitar protestas como la que protagonizaron legisladores y miembros del Partido de la Liberación Dominicana (PLD). Además, para evitar los incidentes del pasado domingo que culminó con varios dirigentes de esa organización y personal de la prensa afectados con bombas lacrimónenas.
De acuerdo con la acusación del Ministerio Público, la presunta red de corrupción desmantelada en la Operación Calamar estaba liderada por los exministros Donald Guerrero, José Ramón Peralta y Gonzalo Castillo. Indica que el entramado se creó para sustraer más 19 mil millones de los recursos del Estado para su beneficio.
El órgano acusador solicitará prisión preventiva y que se declare complejo el caso contra los imputados del pasado gobierno que encabezó el expresidente Danilo Medina.
La jueza Kenya Romero conocerá la medida de coerción en la sala modelo ubicada en el Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional. Esto así por la cantidad de acusados que figuran en la solicitud de medida de coerción.
