SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Con la exhortación a la apertura y la tolerancia entre los pueblos, y una advertencia sobre los efectos nocivos del cambio climático, fue abierta formalmente este martes la cuadragésimo octava reunión de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y la Unión Europea.
El acto central contó con las palabras de bienvenida del canciller dominicano Miguel Vargas Maldonado, quien destacó que los objetivos del encuentro organismo internacional son intensificar el diálogo, fortalecer cooperación entre regiones y abrir fuentes de comercio e inversión. Asimismo, resaltó que en la CELAC hay espíritu de apertura y tolerancia, y que la Unión Europea “comparte esos elementos indispensables para la convivencia y el trabajo mancomunado”.
En tanto que la Alta Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Políticas de Seguridad, Federica Mogherini, aprovechó dicha tribuna para reconocer los esfuerzos de paz en Colombia por acabar con el conflicto armado de más de medio siglo. Enfatizó que el premio Nobel de la Paz que este año ha recaído sobre el presidente de esa nación, Juan Manuel Santos, es un reconocimiento para toda la región.
“Son tiempos de cambio para los continentes; tenemos la responsabilidad de gobernar el cambio(…) Pueden estar seguros, de que la Unión Europea siempre estará comprometida con América Latina y el Caribe (…) Estamos unidos por el mismo compromiso con la justicia (..) Juntos podemos realizar un nuevo vínculo transatlántico. Juntos podemos más”, resaltó la funcionaria.
De su lado, el presidente Danilo Medina, al pronunciar un discurso ante la plenaria, enfatizó los severos efectos del cambio climático en la seguridad alimentaria de los pueblos y la necesidad de que las grandes potencias presten atención a este fenómeno global.
El mandatario sostuvo que no se puede descansar hasta lograr un instrumento legal para la protección del medio ambiente.
“Espero que este diálogo al que damos apertura sea fructífero; que renueve los poderosos lazos históricos y culturales que nos unen (…) Latinoamericanos, caribeños y europeos afrontamos hoy problemas comunes, como las migraciones”.
Igualmente, resaltó que “Poder llevar productos al mercado de la Unión Europea sería de gran ayuda”.
«Se hace necesario que países desarrollados cumplan su compromiso de destinar el 0,7% del PNB a la ayuda para el desarrollo(…) Que cumplan con «el 0,5% al 0,20% hacia los países menos adelantados, ya que las cifras destinadas son aún insuficientes», puntualizó además.
