Un niño de cuatro años de edad muere calcinado y su padre resulta con fuertes quemaduras, luego de que la casa en que vivían fuera afectada por un incendio y reducida a cenizas en la comunidad Los Miche, en el municipio fronterizo de Dajabón.
Según se informó, el siniestro se produjo por la prevalencia de un contrabando masivo de combustibles en la vivienda de las víctimas, así como el desorden que se está generando en esta parte de la frontera.
El menor, de nacionalidad haitiana, se encontraba en la vivienda que, según las autoridades, se utilizaba para almacenar una gran cantidad de gasolinas. Pero también otros combustibles para el contrabando hacia el vecino país de Haití, donde persiste la crisis y la escasez de carburantes.
Además del menor también resultó con quemadura en grandes partes de su cuerpo el padre de este. El hombre se encuentra ingresado en un centro de salud de la zona debido a la gravedad de la situación.
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Los moradores expresan que en los últimos días el contrabando de gasolina se ha intensificado por diferentes comunidades de la frontera. Aseguran que esto sucede ante la mirada indiferente de las autoridades militares del Cuerpo Especializado en Control de Combustible (Cecom). Manifiestan que esta entidad dio rienda suelta al contrabando.
Según el testimonio de algunos ciudadanos de las comunidades Don Miguel, Tamarindo, y los Miche, el trasiego de combustible se ha vuelto un desorden. Dice que si no le prestan atención seguirá provocando pérdidas humanas, ya que las personas almacenan los combustible sin ningún control en las casas.