Una mujer estadounidense madre de cuatro hijos y empresaria perdió la vida luego de practicarse una cirugía estética a mediados de este mes de diciembre en República Dominicana. Sus parientes empezaron a presionar para que se inicie una investigación en torno al caso.
Sucretta Tolliver, nativa de Chicago, es recordada como una madre devota, exenfermera y exitosa empresaria que dirigía una popular boutique en Brighton Park.
“La vida es preciosa, y no lo sabes hasta que te la roban. Hablando en nombre de mi familia, nos han robado”, manifestó su hija, Mariah Price.
El caso de la mujer estadounidense
Indicó que su progenitora viajó al territorio dominicano para una intervención estética que tuvo lugar el 12 de diciembre. Pero falleció dos días más tarde mientras se recuperaba en su domicilio.
Llamé por teléfono con ella esa noche, la noche antes de que falleciera, y sonaba como si tuviera mucho dolor”, expresó Price. “Ella estaba como ‘no le desearía esto a nadie. Duele mucho’”.
Explicó que se sentía indefensa por completo al estar a miles de kilómetros de la mujer e incapaz de cuidarla.
Piden ayuda internacional
Sus parientes, entre ellos el tío de Price, William Tolliver, luchan para saber las causas de su deceso.
“Su certificado oficial de defunción dice hemorragia interna”, dijo. “Hicieron su informe en República Dominicana, pero cuando regrese a casa, haremos nuestros propios informes y luego lo resolveremos”.
Piden al FBI y el Departamento de Estado de EE.UU. investigar su fallecimiento y al médico que realizó la operación.
“Me mantendré firme en la justicia para mi hermana”, dijo William Tolliver.
Señalan que realizaron múltiples llamadas desde Chicago, además de usar el correo electrónico y redes sociales, pero no fueron respondidos por el médico hasta el momento de la publicación.
La familia Tolliver agrega que contrataron a un abogado y trabajan con la embajada estadounidense en República Dominicana para ayudar a repatriar el cadáver a su ciudad natal.
“La única forma en que siento que puedo tener algún tipo de lucha contra lo que le sucedió a ella es que no le suceda a nadie más”, dijo William Tolliver.
