- Antes del enfrentamiento era activamente buscado mediante múltiples hechos delictivos, entre estos la muerte de un Oficial del ERD.
- -Le ocupan pistola que portaba de manera ilegal
San Pedro de Macorís, RD. – Un reconocido delincuente, buscado mediante múltiples órdenes de arresto por la comisión de diferentes hechos delictivos, cayó abatido en horas de la mañana de este martes, al enfrentar a los agentes policiales que les daban seguimiento a los fines de apresarlo, en un hecho acontecido en el sector Villa Canto, del municipio Hato Mayor del Rey.
Se trata de José Alberto Almánzar (a) Hipólito, de 24 años. El mismo residía en el municipio de Los Alcarrizos, provincia Santo Domingo, y murió mientras recibía atenciones médicas en un centro de salud.
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Entre los delitos atribuido a este antisocial se encuentra haberle ocasionado la muerte a un oficial del Ejército Dominicano.
De acuerdo con el informe preliminar, a Almánzar (a) Hipólito lo buscaban mediante las órdenes de arresto No. 2024- TAUT- 00096, 2023- TAUT- 02007, 2024- TAUT- 00084 y la 2022- TAUT- 00994 por la comisión de diferentes hechos delictivos.
Lo perseguía con la orden No. 2024- TAUT- 00907, de fecha 17/03/2024, por el homicidio del primer teniente Ramón Valdez Pérez, ERD, en SDE.
La PN localizó a los sospechosos
En ese sentido, los agentes policiales adscritos a la Subdirección Regional de Investigación (Dicrim), de la División de Investigación del Departamento Hato Mayor y la División de Delitos Contra las Personas (Robo) y la Unidad Sensitiva de Rastreo G12 de la Policía Nacional, localizaron al sospechoso en el referido municipio y se produjo dicho enfrentamiento.
Éste, en lugar de detenerse y entregarse a las autoridades, arremetió contra los agentes que se vieron en la imperiosa necesidad de ripostar la agresión. Asímismo les ocasionaron las heridas que posteriormente le ocasionaron la muerte.
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Tras el enfrentamiento, a “Hipólito” le ocuparon la pistola marca ilegible, serie 5133, calibre 9mm, con una cápsula en la recámara, su cargador y seis cápsulas. La misma la portaban sin ningún tipo de documentación y que utilizó para enfrentar a los policías actuantes.
El cadáver del apodado “Hipólito” lo remitieron al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF), para los fines legales correspondientes.
