Santo Domingo, RD.- Sus días trascurrían como los de una joven de su edad en estudios, trabajo, risas, bailes y cuidado de su pequeño hijo de tres años, todo inicio cuando un día sintió un fuerte dolor de cabeza que luego tuvo que ser ingresada en un centro salud, donde fue diagnosticada con hidrocefalia y tras varias complicaciones los médicos para salvarle la vida se vieron obligados a amputarle sus dos piernas dejándola postrada en una cama.
Entre lágrimas la joven narra el cambio radical que experimento su vida
A pesar de su condición no ha dejado de lado sus sueños de seguir estudiando y convertirse en enfermera para poder ayudar a su madre.
Narran el difícil momento que están pasando, por el dolor insoportable en su cuerpo que hasta le imposibilita dormir.
Por el momento se están quedando en una pequeña habitación que le presto una vecina ya que con la enfermedad se han quedado sin nada.
Solicitan la colaboración de quien pueda ayudarlas, ya que ambas están enfermas y no tiene casas ni fuente de ingresos. Para comunicarse con ellas pueden hacerlo a través de los teléfonos 809 510 6489 Madre. 829-489-2887 Yanet López, Vecina.