La República Dominicana goza del mejor de los mundos en materia cambiaria. Un tipo de cambio flexible con una volatilidad muy reducida. Esto significa que el movimiento del precio de la moneda nacional con relación al dólar refleja los fundamentos macroeconómicos y lo hace sin que haya sobresaltos excesivos.
Cabe destacar que el tipo de cambio, definido como la cantidad de moneda local que se intercambia por una unidad de moneda extranjera, es un precio que puede exhibir movimientos bruscos. Recientemente la cotización de la libra esterlina con relación al dólar se depreció en más de un 10% en un solo día. Esa variación significaría que la cotización peso/dólar pasara de 46 pesos a 50.60 pesos por un dólar en un día.
Afortunadamente la República Dominicana combina una adecuada política fiscal con una política monetaria compatible con una baja volatilidad cambiaria. En ese contexto se puede afirmar que la trayectoria de la cotización del peso/dólar se encuentra dentro del rango establecido por modelos econométricos de proyección de esa variable. Esto arroja tranquilidad a los inversionistas locales e internacionales quienes encuentran muy atractivo invertir en el sector real de la República Dominicana.
La política monetaria fundamentada en metas de inflación ayuda a mantener la confianza en la moneda nacional. La tasa de inflación se ha mantenido por varios años en niveles muy bajos, lo cual provoca que la depreciación del peso -que refleja el diferencial de inflación con los Estados Unidos- sea también un número muy pequeño. Esto crea un entorno favorable a la inversión y a la expansión productiva de la nación.
