Santo Domingo, RD.- Este año que culmina, las pérdidas económicas causadas por los desastres naturales en República Dominicana alcanzaron pérdidas superiores a 2 mil millones de pesos. El último fenómeno fue Fiona que afectó en gran medida la parte Este y Nordeste del país dejando tres personas muertas.
La temporada ciclónica en el Atlántico inicia en junio y termina el 30 de Noviembre.
En septiembre de este año el huracán Fiona y a otras tormentas tropicales causaron cuantiosas pérdidas en el país.
El huracán Fiona, por ejemplo es primer ciclón que entra directo al país, en 18 años. Este fenómeno natural causó daños y muertes en el Este y Nordeste.
Sus lluvias torrenciales y los vientos causaron cuantiosos daños a las plantaciones y la ganadería, al turismo y arrancaron los techos de miles de viviendas.
Las pérdidas provocadas en el sector agropecuario por el paso del huracán Fiona en la región Este superaron 2 mil millones de pesos.
Los sectores más vulnerables ante huracanes, tormentas y sequía son la agricultura, el turismo la minería, cuyos ingresos son equivalentes al 14. 6% del Producto Interno Bruto.
Esto dado que luego de un evento climático la producción agrícola se reduce, la infraestructura hotelera se afecta y disminuye la entrada de turistas al país.
En este año que finaliza, República Dominicana se ha visto afectada por decenas de eventos meteorológicos que han provocado pérdidas económicas millonarias. Además de muertes, desbordamientos de ríos y cañadas, inundaciones y zonas incomunicadas.
Inundaciones
El 4 de Noviembre la población fue sorprendida por un fuerte aguacero que hicieron colapsar al gran Santo Domingo y dejaron un saldo de ocho personas fallecidas, casas inundadas, más 800 vehículos afectados.
En este caso además la ayuda a la población, el gobierno dispuso la entrega de un bono de 100 mil pesos a los propietarios de los autos.
Ante esto, el Banco Central destaca que República Dominicana cuenta con algunos mecanismos que ayudan a mitigar el riesgo de crédito. Tales como el fondo Especial para el Desarrollo Agropecuario, (Agrodosa), así como diversos programas de prevención de desastres.
Por Francis Zabala
