Santo Domingo RD.– Nuevas imágenes explican el violento recibimiento que dieron policías de tránsito al equipo de CDN y otro medio escrito cuando daban cobertura a la inspección que realizaría el Defensor del Pueblo en el Canódromo.
Un día después de haber agredido a Víctor Olivo, reportero gráfico de CDN, y de mantener retenida una videocámara de este canal, la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (DIGESETT), devolvió el equipo deteriorado, así como las grabaciones.
Ver esta publicación en Instagram
Espontánea afloró la queja de los que aguardaban a la luz de un sol ardiente la remota posibilidad de ser atendidos en el Canódromo ante la llegada del defensor del pueblo.
La comitiva explica los motivos y se le da acceso a Pablo Ulloa junto a los demás defensores y la prensa.
Avanzan, mientras los equipos de CDN y Listín Diario tratan de registrar la inspección, y al mismo tiempo, el mar de vehículos y motores vueltos chatarras. Hasta ese punto todo fluía normal. Pero aún no habían llegado bien a la oficina, atacan a un fotorreportero de periódico y le confiscan su cámara.
- Contenido relacionado: Defensor del Pueblo se reúne con Abinader tras agresión en Canódromo
El atropello causó la indignación del defensor que pedía hablar con la encargada del lugar.
Los agentes insisten en impedir el acceso y la comitiva avanza hacia la oficina principal. Es en ese momento cuando el personal de la Digesett le va encima al defensor del pueblo, Pablo Ulloa, lanzando además improperios.
Para acentuar la agresión al defensor, sale en actitud violenta e insultos a la prensa la recién destituida comandante de la oficina, Ysabelita De Los Santos Pérez.
Posteriormente, como turba atacan a Olivo, reportero gráfico de CDN, y le arrebatan por la fuerza su equipo de trabajo.
Hasta ese momento se logró documentar. El personal de la Digesett retuvo la videocámara, en flagrante violación a la libertad de prensa, retornándola en muy mal estado un día después.
Sin embargo, otras imágenes de celulares y un dron de la entidad garante de los derechos de los ciudadanos hicieron constar cuando la misma turba sometía al fotógrafo del Defensor del Pueblo, el brutal maltrato al secretario de la entidad, el atropello a una periodista de prensa escrita y cómo la comandante terminaba de sacar a «bastonazos» a uno de los abogados que también vieron coartado su derecho a supervisar las labores de las instituciones públicas
Por: Karelyn Cuevas
