Santo Domingo RD.- El Ministerio Público del Distrito Nacional logró que un tribunal de esta jurisdicción imponga 30 años de prisión a los cuatro acusados del asesinato de Yeri Pascual Cordero, hijo de Pascual Cordero Martínez, alias El Chino, un hecho que ocurrió la madrugada del 9 de marzo de 2020, en el sector Bella Vista.
Pablo José Santos Polanco, Gerald Utate Rodríguez y Maikol José Báez Santos cumplirán la pena en el Centro de Corrección de San Pedro de Macorís. Mientras que, José Alberto Morán Pimentel (El Motorista y/o El Pollo) lo hará en cárcel pública de Baní, en la provincia Peravia.
La condena a 30 años se dispuso tras validación de pruebas
Las juezas Arlin Ventura, Leticia Martínez y Emely Bruno, del Tercer Tribunal Colegiado, dispusieron la condena tras declarar buenas y válidas las pruebas. Estos elementos los presentaron las fiscales Norabel Méndez, Yuderki Utate, Elaine Soto y Topacio Suero.
Los fiscales litigantes presentaron pruebas testimoniales, documentales, periciales, ilustrativas, materiales y visuales que resultaron contundentes para que el tribunal las acogiera y los declarara culpables. Los acusaron de asociación de malhechores, asesinato y uso y porte ilegal de arma de fuego.
Los cuatro hombres violaron los artículos 265, 266, 295, 296, 297, 298 y 302 del Código Penal. En ese orden los 66 y 67 de la Ley 631-16, para el Control y Regulación de Armas, Municiones y Materiales relacionados.
¿Como se produjeron los hechos?
El expediente narra que los agresores tenían alrededor de un mes dándole seguimiento y preparando la muerte de Yeri Pascual Cordero Sosa. Finalmente, ejecutaron el crimen en la fecha antes citada, cuando la víctima salía de una discoteca en la que celebraba su cumpleaños. Al momento de los hechos Pascual estaba con Jassel Kadafi Estepan Lebrón y otros amigos.
Cuando el grupo salió del centro de diversión, los interceptaron Santos Polanco y Morán Pimentel, quienes desde una motocicleta realizaron varios disparos hacia el vehículo. Dichos disparos impactaron a Cordero Sosa en el costado izquierdo y a Estepan Lebrón en la cabeza.
El órgano de persecución estableció que Manuel Mesa Beltré, condenado a 30 años por narcotráfico, pagó por el asesinato un millón de pesos. a Gerald Utate Rodríguez, quien distribuyó el dinero a todos los involucrados.
