SANTO DOMINGO, República Dominicana.- A un mes de incendiarse 17 viviendas ubicadas a orillas del Río Ozama, en el sector La Ciénaga, las familias que quedaron a la intemperie aún están a la espera de una mano amiga.
Los afectados indicaron que se mantienen refugiados en casas de amigos, atravesando todo tipo de precariedades.
Todavía es la fecha en que se desconoce la causa del siniestro, que forzó a salir de sus hogares a esos padres de familias.