Al menos 18 civiles, entre ellos 13 niños enfermos, fueron evacuados este viernes por la Media Luna Roja de la localidad de Madaya, sitiada por el régimen sirio, afirmaron a la AFP un médico y un socorrista, que trataron a los menores.
Paralelamente, otras 18 personas, entre ellas un número indeterminado de niños, fueron evacuadas de Fua y de Kafraya, dos aldeas chiitas de la provincia de Idleb (noroeste), asediadas por grupos rebeldes, informó a la AFP una fuente de seguridad siria.
La Media Luna Roja anunció en Twitter la evacuación de un total de 36 personas de Madaya y de las dos aldeas, afirmando que se trataba de «casos humanitarios». Publicó dos fotografías de convoyes.
«La operación se realizó en coordinación con la ONU», indicó por teléfono el médico Mohamad Darwish, precisando que el convoy partió de Madaya y «se dirigía hacia Damasco, donde los pacientes recibirán tratamiento». Un socorrista de Madaya confirmó la salida del convoy.
Entre los casos de niños evacuados de Madaya figura uno de 10 años enfermo desde hace un mes de meningitis y un bebé y un niño enfermos de septicemia.
Cuatro de los cinco adultos son mujeres; una de ellas tuvo un aborto y necesita un legrado, afirmó el doctor Darwiche.
La AFP había mencionado estos casos hace una semana en un artículo en el que el padre de Yamane Ezedin, el niño enfermo de meningitis, hacía un llamamiento al mundo para salvar a su hijo.
«Yaman no para de gritar de dolor, porque es insoportable», contaba Alaa. «Se retuerce delante de nosotros y no podemos hacer nada por él, salvo darle tres pastillas analgésicas por día. Ya no nos reconoce».
En virtud de un acuerdo de septiembre de 2015, las evacuaciones de Madaya y Zabadani (también asediada por el régimen en la provincia de Damasco) debe ir acompañada de una operación similar en Fua y Kafraya.
«Hay que evacuar los niños enfermos de ambos bandos, con o sin acuerdo», afirmó a la AFP el doctor Darwich.
