El Papa Francisco creó este sábado en la Basílica de San Pedro del Vaticano a 17 nuevos cardenales, 13 electores y cuatro no electores, que se sumarán a los miembros del Colegio Cardenalicio, en víspera de la clausura del Jubileo Extraordinario de la Misericordia.
Los 13 cardenales que tendrán derecho a voto en un futuro cónclave para elegir nuevo pontífice serán:
• Calos Osoro, Madrid.
• Baltazar Enrique Porras Cardozo, Venezuela.
• Carlos Aguiar Retes, México.
• Sérgio da Rocha, Brasil.
• Blase J. Cupich, EEUU.
• Joseph William Tobin, EEUU.
• Kevin Joseph Farrell, EEUU.
• Mario Zenari, Italia.
• Jozef De Kesel, Bélgica.
• Dieudonné Nzapalainga, República Centroafricana.
• Patrick D’Rozario, Bangladesh.
• Maurice Piat, Isla Mauricio.
• John Ribat, Papúa Nueva Guinea.
Los otros cuatro, arzobispos Anthony Soter Fernández (Malasia) y Renato Corti (Italia), obispo Sebastian Koto Khoarai (Lesoto), y revendo Ernest Simoni (Albania), no podrán participar en la elección por por exceder los 80 años.
Ceremonia
En la ceremonia, el Papa Francisco los recibió con un mensaje de misericordia asegurando que «la elección, en vez de mantenerlos en lo alto del monte, en su cumbre, los lleva al corazón de la multitud, los pone en medio de sus tormentos, en el llano de sus vidas”.
“Amen, hagan el bien, bendigan y rueguen… amen a sus enemigos, hagan el bien a los que los odian, bendigan a los que los maldicen, rueguen por los que los difaman»
En este sentido, el Pontífice, rechazó «el virus de la polarización y la enemistad se cuela en nuestras formas de pensar, de sentir y de actuar» y que ha vuelto a los refugiados e inmigrantes un enemigo, exhortó a ser el ejemplo de que, pese a ser de diferentes lugares, pueden unirse para formar un equipo de trabajo por el bien de la Iglesia.
«Venimos de tierras lejanas, tenemos diferentes costumbres, color de piel, idiomas y condición social; pensamos distinto e incluso celebramos la fe con ritos diversos. Y nada de esto nos hace enemigos, al contrario, es una de nuestras mayores riquezas»
Este es el tercer consistorio de Francisco desde el inicio de su pontificado en marzo de 2013 y en esta ocasión el pontífice ha elegido designar con la púrpura a 17 cardenales procedentes de 11 países de los cinco continentes, en un gesto que relaciona con la «Universalidad de la Iglesia».
