Al menos 13 personas murieron este jueves por bombardeos y disparos de proyectiles en la ciudad de Aleo, la mayor del norte de Siria, y en la población de Manbech, al noreste, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Nueve de los fallecidos, entre ellos siete menores y mujeres, perdieron la vida por ataques de aviones de guerra en los barrios de Tariq al Bab y Salehin, en la urbe de Alepo.
Por otro lado, otras tres personas perecieron por bombardeos de la coalición internacional contra el autodenominado Estado Islámico (EI) en Manbech.
Asimismo, hubo un cuarto muerto en esta población por el impacto de proyectiles en distintas zonas.
Manbech es escenario, desde el pasado 31 de mayo, de una ofensiva de las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza armada kurdo árabe, respaldada por la coalición internacional, que trata de arrebatarle al EI el control de la localidad.
El Observatorio destacó que los combates entre las FSD y el EI se desarrollan actualmente en el sector norte del barrio de Al Hizauna, en Manbech, y en áreas del oeste de la ciudad.
Mientras, en Alepo, facciones armadas opositoras lanzaron el martes un ataque contra zonas en poder de las autoridades, después de que el ejército cortara la semana pasada la vía principal de suministros a los distritos del este de la urbe, en poder de los rebeldes.
Esta escalada de la violencia en la provincia de Alepo coincide con una tregua en el país, iniciada el pasado 6 de julio y que fue prorrogada el martes por el ejército por 72 horas.
