A raíz de los tiroteos ocurridos durante el fin de semana en los Estados Unidos, en el que al menos seis personas —entre ellas un policía estatal de Pensilvania— fueron asesinadas y decenas más resultaron heridas durante una oleada de violencia y tiroteos en distintos puntos.
Las balaceras en los suburbios de Chicago, el estado de Washington, Pensilvania, San Luis, el sur de California y Baltimore ocurrieron después de un incremento en los asesinatos y demás incidentes violentos durante los últimos años, que según los expertos se aceleraron durante la pandemia de COVID-19.
En lo que va del 2023, en Estados Unidos se han registrado 315 tiroteos, de los cuales 24 han terminado en muertes masivas.
Según Gun Violence Archive, el número total de muertes es de 19,901, de las cuales 8,861 han sido por homicidio, asesinatos, muertes involuntarias o por uso de armas de manera defensiva. Mientras que, 11,220 muertes han sido por suicidio.
El número de niños asesinados, entre 0 y 11 años, es 706 y 306 han sido los menores de 11 años lesionados por tiroteos.
Por otro lado, la cantidad de adolescentes entre 12 y 17 años, asesinados son, hasta el momento 706 y lesionados, 1,884.
En los últimos siete años, (2016 – 2022) se han registrado unos 3,431 tiroteos masivos en los Estados Unidos. 4,246 incidentes de asesinatos o suicidios por armas y 13,987 han sido tiroteos sin intención.
En 2022, el número de muertes reportadas en Estados Unidos fue de 44,364, con 38,571 lesionados. Además, ocurrieron 646 tiroteos masivos y 36, fue el número de asesinatos masivos.
Gun Violence Archive, es un archivo en línea de incidentes de violencia armada recopilados diariamente de más de 7,500 fuentes policiales, de medios, gubernamentales y comerciales en un esfuerzo por proporcionar datos casi en tiempo real sobre los resultados de la violencia armada.
