Con el trabajo de rescate terminado, las autoridades indias comenzaron a limpiar los restos destrozados de dos trenes de pasajeros que descarrilaron en el este de ese país, matando a más de 300 personas e hiriendo a cientos.
Se recuperaron quince cuerpos el sábado por la noche. Los esfuerzos continuaron durante la noche mientras se usaban grúas pesadas para retirar un motor asentado en la parte superior de un vagón de tren.
No se encontraron cuerpos en el motor. El trabajo se completó el domingo por la mañana, dijo Sudhanshu Sarangi, director general de bomberos y servicios de emergencia en el estado de Odisha, donde ocurrió el incidente.
Las investigaciones preliminares revelaron que se dio una señal al Coromandel Express para ingresar a la vía principal. Pero luego se quitó la señal.
El tren ingresó a otra línea, conocida como la línea circular, y chocó contra un tren de mercancías estacionado allí. Así lo precisó la agencia de noticias Press Trust of India.
Escenas caóticas estallaron el viernes por la noche cuando los rescatistas se subieron a lo alto de los trenes destrozados para abrir puertas y ventanas con sopletes para tratar de salvar a las personas que estaban atrapadas dentro de los vagones.
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Diez a 12 vagones de un tren descarrilaron. Los escombros de algunos de los vagones destrozados cayeron en una vía cercana.
Los escombros recibieron el impacto por otro tren de pasajeros que venía en dirección opuesta. Esto provocó que hasta tres vagones del segundo tren también descarrilaran, dijo Amitabh Sharma, portavoz del Ministerio de Ferrocarriles.
