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El ex cónsul de Haití en República Dominicana, Edwin Paraison, pidió a los Estados Unidos ayudar a Haití controlando las crecientes llegadas de armas de fuego y municiones provenientes de esa nación, que tanta violencia generan y alimentan las bandas criminales que aterrorizan a la población haitiana.
Paraison dijo que en su país se produce un fenómeno no visto en ninguna parte del mundo, que desde la comunidad internacional se ha promovido la federación de esas gangas que han provocado cientos de muertos en la vecina nación.
Denunció que hay un complot en contra de Haití, y todavía no se sabe si es por los recursos naturales que se saben existen en ese país.
El presidente de la Fundación Zile dijo no entender porqué la comunidad internacional no le da mayor apoyo al país; para que pueda salir de la crisis que está atravesando.
Agregó que es sumamente preocupante lo que sucede en su país, y cierto comportamiento de esa comunidad internacional frente a la crisis, pero en esta ocasión hay un enfoque muy particular con respeto a Estados Unidos referente al tráfico de armas provenientes de territorio norteamericano y que llegan a manos del crimen organizado en Haití.
“Hoy día es Haití que le pide la colaboración a los Estados Unidos para que ayude a controlar la llegada de armas y municiones; que alimentan la violencia, que han provocado tantas víctimas en Haití, y que alimentan las gangas. Insistió que «no se ha visto en ninguna parte que desde la comunidad internacional se ha promovido la federación de bandas en Haití”.
Paraison sostiene que en Haití no se fabrican armas, y por lo tanto esas llegan de algún lado; hasta ahora, la mayor parte de ellas que se han podido confiscar, llegan desde Estados Unidos.
Puso como ejemplo el caso de la Iglesia Episcopal, a la que él pertenece, que tuvo una situación muy difícil; porque un grupo utilizó el nombre de esa iglesia, y su exoneración, para trasportar hacia Haití un contenedor en el cual había armas de fuego.
Recalcó que la cuestión de las armas que están llegando Haití de manera tan fluida, tiene que ser controlada.
Edwin Paraison dice que la mayoría de los sectores políticos y de la sociedad civil de Haití rechazan la presencia de tropas extranjeras para combatir las bandas criminales; debido a la mala experiencia que tienen sobre esa iniciativa, además de que afecta su soberanía.
“Pero en la mayoría de los casos en Haití, mayoría de la clase política, directores de opinión, de los grupos organizados; siempre miran la experiencia que hemos tenido con ese tipo de fórmula de presencia de tropas internacionales, no han dado los resultados”, enfatizó.
Agregó que lo que requiere Haití para enfrentar a las bandas criminales es un reforzamiento de su cuerpo policial.
