La misa con ocasión del Corpus Christi y su tradicional procesión ha sido cancelada ante la imposibilidad del papa Francisco de celebrarla por el persistente dolor de rodilla, que le impide andar y estar mucho tiempo de pie, informó el Vaticano.
«Debido a las limitaciones impuestas al papa por la gonalgia y a las necesidades litúrgicas específicas de la celebración, no se celebrará la Santa Misa y la procesión con la bendición Eucarística de la fiesta del Corpus Christi«, comunicó el Vaticano en una nota.
En las pasadas celebraciones el papa Francisco estuvo presente sentado en una silla de ruedas y leyó la homilía preparada para la ocasión; mientras que la misa la ofició el cardenal Giovanni Battista Re, decano del colegio cardenalicio.
En esta ocasión, se ha decidido cancelar definitivamente esta misa que Francisco antes de la pandemia solía celebrar en alguna parroquia de la periferia romana.
Los problemas en la rodilla derecha también hicieron aplazar el viaje a la República Democrática del Congo y Sudán del Sur; previsto para principios de julio por consejo de los médicos, debido a sus dolores en la rodilla, informó el Vaticano.
Los médicos aconsejaron al papa no hacer esfuerzos para no comprometer los resultados de las terapias en la rodilla que comenzaron hace algunas semanas y sobre todo basados en infiltraciones y descanso.
El portavoz vaticano destacó que el viaje se ha «aplazado y no anulado», afirmó que se están viendo mejorías en la evolución de la rodilla; pero que «los médicos han explicado que un esfuerzo excesivo podría hacer que volviese a lo anterior y no recuperar las ventajas logradas hasta ahora«.
Previamente, durante la reunión con los obispos italianos, Francisco les confesó que no quería operarse y que continuará con las infiltraciones para curar su dolencia.
Fuente: EFE
