El gobernador de Louisiana dice que el ataque a la policía en Baton Rouge fue injustificado. John Bell Edwards dijo ante los medios de comunicación este domingo por la tarde que el agresor cometió «un ataque absolutamente abominable, atroz», e indicó que el odio tiene que parar.
Tres agentes murieron en la ofensiva frente a una tienda en Baton Rouge ubicada aproximadamente a 1,6 kilómetros (una milla) del cuartel de la policía el domingo por la mañana temprano. Otros tres resultaron heridos. El agresor fue baleado de muerte.
La policía dice que no hay un hombre armado activo en Baton Rouge donde tres agentes de la ley fueron asesinados el domingo por la mañana.
El coronel Mike Edmonson le dijo a la prensa: «Creemos que la persona que mató a balazos a nuestros agentes es la persona que fue baleada y muerta en el lugar».
La secretaria de Justicia Loretta Lynch, en respuesta a los ataques a la policía el domingo en Baton Rouge, Louisiana, dice que no hay lugar en Estados Unidos para esa violencia tan espantosa.
En un comunicado difundido el domingo, Lynch dice que condena las muertes a balazos de tres agentes y el que varios más hayan quedado heridos «en los términos más enérgicos posibles». Prometió también todo el apoyo del Departamento de Justicia a medida que la investigación se lleva a cabo.
