Un hombre de Brooklyn está utilizando un servicio de llamadas de vídeo para sordos para extender el brazo y tocarse, alegó la empresa proveedora del servicio en una demanda.
Se trata del dominicano David Marcano, supuestamente uno de los más fervientes usuarios de software ofrecidos por una compañía de Florida, ZVRS, que recibe dinero federal cada vez que una persona con discapacidad auditiva utiliza su producto para hacer una llamada, según la compañía.
El software permite a los sordos llamar a uno de los intérpretes de lenguaje de señas de ZVRS a través de video chat. Los intérpretes actúan como operadores, haciendo llamadas a terceros en nombre de la persona sorda y luego traducir la llamada.
Pero Marcano, de 51 años, no es sordo, y sus llamadas no necesita ninguna traducción, según dice de la compañía, en documentos de la corte federal de Brooklyn.
La compañía exige compensación económica por el agravio presuntamente cometido por el demandado.
