Un derrumbe parcial ocurrido en el interior de una antigua edificación del centro histórico de La Habana causó heridas a cuatro personas, según pudo comprobarse en el lugar del suceso.
Una losa de la cubierta se desplomó y afectó la habitación inferior del edificio de tres niveles ubicado en una barriada del municipio La Habana Vieja; la zona más antigua de la capital, indicaron fuentes oficiales.
Una brigada de bomberos, dos ambulancias, agentes de la policía y autoridades estatales se desplazaron a la zona del siniestro registrado poco después de las 7 de la mañana.
Los lesionados son dos mujeres y dos niños que fueron trasladados a centros hospitalarios, explicó a los medios el primer secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC, único legal) en la provincia Habana, Luis Torres Iribar.
Varios vecinos se quejaron de la situación de deterioro del edificio afectado y los colindantes.
También se quejó de que la cisterna que abastece agua a la edificación está reportada por contaminación hace más de un mes a Salud Pública y a la empresa estatal Aguas de La Habana, y «aquí nadie ha venido a resolver nada».
En 2020 el desplome de un balcón de un edificio también de La Habana Vieja provocó la muerte de tres niñas de 11 y 12 años; y un trabajador de los servicios de recogida de basura falleció tras caerle encima parte de la pared de un edificio.
La situación de la vivienda es uno de los principales problemas socioeconómicos de Cuba, particularmente en La Habana; la provincia más poblada con 2.1 millones de habitantes.
Según datos citados por la web oficial Cubadebate, La Habana tiene 185,348 inmuebles en mal estado, de los que 83,878 necesitan una reparación parcial y 46,158 requieren una reforma capital.
Además, se necesitan 43,854 hogares para damnificados por derrumbes previos -y que residen en albergues estatales-; así como otras 11,458 casas por el aumento de la población en la ciudad.
Cuba, un país de 11.1 millones de habitantes, cuenta con más de 3.8 millones de viviendas de las que el 39 % se encuentran en regular y mal estado técnico; de acuerdo con cifras de 2021 de la Dirección General de la Vivienda.
En esa fecha se necesitaban 929,695 casas, de las que había que construir unas 527,000 y rehabilitar otras 402,000.
El parque inmobiliario del país se encuentra deteriorado por la escasez de materiales y la falta de mantenimiento, frutos ambos de la crisis económica que arrastra el país, y el azote de los huracanes.
Fuente: EFE
