Paraguay.-Cinco mujeres se encadenaron el lunes enfrente del Palacio de Justicia de la capital paraguaya pidiendo la absolución de 12 campesinos acusados de matar a seis policías durante una balacera en el desalojo de una finca en 2012.
El juicio oral y público finalizó el lunes con la presentación de los alegatos de la defensa.
El magistrado Ramón Trinidad, presidente del tribunal, dijo que el lunes próximo se leerá la sentencia.
Guillermina Kanonnikoff y Margarita Durán, activistas de los derechos humanos, encabezaron al grupo integrado, además, por Angelina Paniagua, Carmen Paredes y Elida Benitez, familiares de los acusados.
«Permaneceremos encadenadas hasta el lunes reclamando al tribunal la absolución de los campesinos porque la fiscalía no presentó pruebas de que haya sido ellos los responsables de la muerte de los policías», explicó Kanonnikoff. La policía no intervino para impedir acción de las mujeres.
La fiscalía solicitó penas de entre cinco y 40 años de cárcel para los trabajadores rurales por los presuntos delitos de homicidio doloso, invasión de terreno ajeno, obstrucción a la persecución penal y asociación criminal.
En tanto, el abogado Amelio Sisco, defensor de los labriegos, informó que pidió la absolución de sus clientes «porque la fiscalía no presentó ninguna prueba concreta en contra de ellos y porque el inmueble ocupado en 2012, de 2.000 hectáreas, fue donado por su propietaria al Estado».
