Santiago de Chile.- El dramaturgo chileno Egon Wolff, uno de los más destacados autores teatrales del país austral y ganador en 2013 del Premio Nacional de Artes de la Representación, falleció la noche de este miércoles, informaron hoy fuentes gubernamentales y su familia.
«Nuevamente un gran dramaturgo y premio nacional nos deja. Muchas gracias don Egon Wolff por el inmenso aporte al teatro chileno», escribió en twitter el ministro de Cultura, Erbesto Ottone.
«Autor de ‘Los invasores’ obra cumbre del teatro nacional. Un grande de nuestras tablas nos ha dejado. Todo nuestro cariño a su familia», añadió.
El pasado 16 de octubre falleció Juan Radrigán, otro destacado dramaturgo chileno, también ganador del Premio Nacional.
La obra «Los Invasores», una pieza clave de la creación de Wolff, fue representada por primera vez en 1963 por el Teatro de la Universidad de Chile con la dirección de Víctor Jara, que además de cantautor era actor y director y profesor universitario.
Ingeniero químico de profesión, Wolff escribió una veintena de obras, entre las que destacan «Flores de papel», «Mansión de lechuzas» y «La balsa de la medusa», además de «Los Invasores» que fue objeto de una polémica agria por el fuerte antagonismo de clases sociales que muestra.
Sus obras han sido representadas en una treintena de países, especialmente «Flores de Papel», que en 1970 ganó el primer premio del concurso Casa de las Américas de Cuba y ha sido presentada en Argentina, México, Estados Unidos, Francia y el Reino Unido.
Antes, en 1959, había ganado con «Parejas de Trapo» el primer premio en el Concurso Teatro experimental de la Universidad de Chile (1959), y en 1960 recibió la beca Fullbright para asistir a la Universidad de Yale con un montaje en inglés de su obra «Niñamadre».
Su dramaturgia aborda temas sociales y política contingente con componentes existencialistas, ahondando en la lucha de clases, fracturas familiares, disputas generacionales y decadencia social.
Wolff fue además profesor de Dramaturgia en la Escuela de Teatro de la Universidad Católica y miembro de la Academia Chilena de la Lengua.
En una entrevista publicada en 2009 Wolff se lamentaba de que los dramaturgos se dediquen actualmente más a «crear textos que se monten, de preferencia con rostros conocidos», subrayando que el teatro debe fundamentalmente «investigar la naturaleza humana».
«El texto teatral ha tenido un cambio fundamental. De ser unipersonal, se ha convertido en un producto multifuncional y colectivo, basado en adaptaciones de cuentos y noticias. Dejó de escribirse sobre la intimidad de los personajes», precisaba.
